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EN CARTAGE. A DE r;.;DL\.S
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virrey, vieron al fln cerrá rseles todas las pu ertas cuan–
do supieron que el 9 ele agos to las a rmas Yictoriosas
ele Bolívar se habían apoderado de Santa Fe y pmsen–
ciaron por sus ojos la entrada en Car tagena del
asesor, oidores y minis tros ele los demás tribuna–
les y otros muchos fu gitivos, cccon el Yosticlo que
que tenían, hechos
un
obj eto el e dolor y compa–
siólu . r
En tales condiciones no tenían co rno dedicarse á
ejercer. su mm1sterio y apenas s i en esos últimos
días del Santo Oficio se pudo llegar á terminar un
solo proceso.
Circulado en Santa Marta, en septiembre do 1815,
el edicto de gracia del Inqui sidor General
á
favor de
los que hubi esen in currido en el crimen ele la here–
j ía
y
otros
2
y en jnnio del a fio s ig uiente el que re–
novaba la obligación ele delatar al S anto Oilcio los
delitos ele suconocimiento, 3 y despu és el e
más
el e un
siglo que se hallaba en sus penso en Cartago na la
publicación del gene ral el e fe, por causa el e las inquie–
tudes y encuentros con el obispo Benavicl es
y
al–
gunos ele sus sucesores y con los eanóni gos de la
catedral, por fin se veriO có en la cua resma el e 1818,
con a istencia clel gobernador do la plaza , los Ca–
bildos eclesias tico
y
ec ula r, las comunidades re–
ligiosas , los jefes
m
ilitarcs y de Heal Hacienda
y
toda clase de personas el e uno
y
otro sexo.4
A
ese
efecto, Oderiz había hecho circular un documei1to,
r.
Carta de
23
de sep tiembre de
r8rg.
2 .
Carta de
22
de septiemb re de
r8r5.
3. Carta de
r8
junio de 1816..
4· Carta de
r5
de abril de 1818.