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~íbíc1o
con Jnayor
éntusia.sn1o q_uo
en PoPtugai.
l!~~
Rey de Nápoles m,anifestó su regocijo, di.cie:ndo al :pa–
:h'a Clen1.ente, q,ue estaba l?ronto
á
restituirle
1os·
d.uca–
dos·de Beneveuto
y
P-onte--Corvo·
en
J.n,uestrra
d~ 1~eeo-~nocinüonto. El :rrey de.Cerdeña
hizo.
eJecuta:¡,~
el
breve·
~on
señal.esde veneracion. lH'ofunda. La
~n1p~watiz:.
lv!ar
ia Teresa 1nancló ej,ecutarlo en
sus-
estados b.ere–
ditarios·."
~'En
otTas partes
del vasto
impel·io'
de
Al~mania.
hubo varias dificultades, lHteidas prineipahnente de"
los ex-jesuitas, q_u_e se
~irvieron
<\le
la debilidad ele
algu...
nos prh:wipe&, para opone-r pretestos
'-le
tesistencia
á
la.
santa
Sede. El
ex-jesuita
)j"'~ller
inundó t<;>do-s los
dia-–
rios de Almnania, de llolanda
y
de
B~lgica
de artí-–
culos enveneuados contra el
papa,
aun, antes-
t:pie
apa-–
recie·&e
el
hr~vc,
y
mantenia
un~t.vasta.
co:r.res];>-0ndm1-
cia con lo& de
]'ntncia
é
Italia,.
q:ue 1e-
enviaban~
n1on,..,
tiras.
En
las provincias polo:nesas
pert~neeiontes
ya
á
la Prusia
y
á
la Husia, del nüsn1o 1.nodo q\l.e en
Ja
Si-·
lesia pensia,na, los ex--je:::;uitas se prevalieron de la pro-–
teccion de :principes uo católicos) hacie11dose culpa- –
bles
Je
grave
y
pública desobediencia
á
la.
Santa
Sede"
Jj)l embrrj('dor det general de los
l~tnar;iciJrWS
debió
habel~·
adquirido. una grande influencia en el espíritu de
]'e-·
derico II, quo súbitan1.ente se declaró su protector,.
cuando
seis n1eses-
antes. r eyeliera
las
insinua
cio11<~s del
en1bajado:r.
La
ernperatriz.
Uatalina se opuso
tambi.en~\,
la publicacion del
breve.
El
Nuncio do
V
DH's
ovia no per–
día ocasion do
hacer
sentir
á
loo ex-jesuitas prusia–
nos
y
rusos la indignidad de su conducta. Sol>re to–
do,
en
Silesia no guardaban
ninguna
1nedida. Se pen–
só
en
elejir un
provicario,
pues
el general &e. hallaba
cau:ivo. Y no
solame1.1te
conservaban su hábito
COil
infraccion del breve,
sino
que continuaban predican–
do, confesando
y
recibiendo
novicios,
y
conBun1ando.
sus
actos cis.maticos con la. eleccion de su vica:rio ge–
neral."
226.
''El m:>zobispO'
de P 'aris reprendió
y
suspendió.
á
un pa.dre ex-jesuita, que eu un
scwn~on
ele San Fran–
eisco
Javier tnvo la
impru<l(-mcia de
vertiJ:- ciertas es–
presiones;
y
no obstante, se
fo1jó
uua
carta
á
·nom.bre
del arzobispo en téen1inos amargos
é
insolentes contra
el breve de estincion,
y
qne no·
con1enzó
á
circuhu:
sino