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10-± -

375

;~e

ha

hec.ho

gran mérito, en descrédito de

las

cartas provin

ciales,

de que su autor estaba tocado en

el cerebro, y por tanto, no e;ra de estimarse ni creerse lo

que escribía. Dió motivo

á

esta suposicion el suceso

siguiente. Yendo Pascal

en

carruaje, se desbocaron

dos de los caballos, y estuvo

á

punto de perecer cer–

ca del puente de

N

euilly; de cuyo accidente quedó

tan afectado, que, segun se dice, creia ver siempre

á

su lado izquierdo uu abismo. De esta relacion se

va~

lía el P. jesuita Patouillet, pará

~decir

en el tomo

2q

de su

dicciona_rio de libros jansenistas-"Si

Pascal tenia

un cerebro lastimado, como tenia un corazon dañado,

no merecen crédito sus decisiones y relaciones.

Un

hipocondriaco que veía siempre un abismo

á

su lado,

ha visto en los libros de los casuistas lo que no babia

en

ellos."

N

uestl:os lectores advertirán, que si la delicada

cons-~

titncion del señor Pascal quedó fuertemente sacudi–

da, hasta dejarle una impresion profunda, el recuerdo

del peligro

á

que se halló tan espuesto, no era sufi–

ciente para trastornarle el celebro, y quitarle eljuicio.

Se cita la palabra ele Voltaire, que creía desordenada

la

cabeza de Pascal despues del suceso de

N

euilly; pe–

ro tal sqposicion hiperbólica no destruía el magnifico

elogio que hiciera el mismo Voltaire de las cartas pro–

vincíales,yque dejamos referido.

Y

tan cierto, que este

mismo, en su carta

80

M,

de Cideville, se espresaba

así-"No escribo contra'el autor de las

cartas pro?)Íncia–

le8,

sino contra el autor de los

pensamientos,

donde me

parece que ataca

b

humanidad, mas cruelmente que

lo hiciera con los jesuitas." En la carta siguiente al mis–

mo sugeto decia-'-"me confirmo mas en la opinion de

que, los mas grandes hombres se hallan tan espues–

tos

á

engañarse como los de pocos alcances; y juzgo

de

las fuerzas del espíritu como de las del cuerpo."

Cuando el juicioso escritor del artículo

Pascal,

en

. el

d~ccionario

universal, histórico, crítico

y

bibliogr.fiáco,

se

hac~a car~o

de esapalabra exagerada, apoyándose en el

test1momo de M. Bosn

t

se espresaba de esta manera–

Hese cerebro desordcnn,do en

1654

produjo en

1656,