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mulgad a; Ot·llenando á los ingleses que se uni crnn á
¡;,
es-·
cuadra española para destronada; prometiendo grand es re–
compensas
á
los que se a poderasen de
la
reina, y la entre–
gasen á los cató licos para cas tigar sus crímenes; y entre–
gando la Inglaterra al primer ocupante.
24·.
lnocencio X .
Este Papa ha dejaao á la historia un triste documento
de pt•otesta y conde nacion. cont1:a la paz de W estfalia. El•
tratado puso
térn1ino
á una guerra larga
y
desastrosa, por
medio de transaciones que se creyeron convenientes 'y
a~m
neeesarias; y los protestantes apa recían con miramientos que
se
l~s
tenia, y qu e no habrían obtenid o antes de la victoria
de sus arma s. E l l?apa no pudo sufl>ir esta condu<lta, y entre
otras cosas dijo asi-'rcon profundo d olor hemos sabido,
que en esos tratados se dej an para siempre á los herejes
los bienes eclesiásticos que ocupaban de a ntemano; se les
J>crmite el ejercicio de su he rejía, la edifi cacion de templos,
y
la participacion de cargos públicos, y de alg unos arzo–
bispados y obispad os,
y
otras dignidad es y beneficios ecle–
siásbicos, sin reconocer
las anatas, y los meses conesp<m.–
dicntes al
apa, con sus derechos y reservas. En cumpli–
miento del oficio pastoi-al, que el cielo nos ha concedido,
condenamos ese tratado
de
paz,
aunque hubiese sid o <lOn–
fi rmado con juramento, y protestamos de su nulid ad en pre–
sencia de Dios."
25.
Clemente X I.
Varias constituciones de este Pa pa le dan un lugar me–
recido en el bosquej o de la Curia romana. Recuerden nues–
tros lectores las arrogantes palabras, con que reprendio
á
varios obispos de la I g lesia galicana, porq ue se creyeron
con derecho de juzgar con el Papa; lo que Clemente inte'!/–
preta ba de otro modo, diciénd oles-"los obispos particula–
J'es no tienen que disentir los decretos de la silla apostóli–
ca, sino cum plirlos"-Tuvo á .mal que el ma rqu és de Bran–
de burgo tomase el nombre de Reí d.e Prusia sin el permiso
de la Santa Sede; lo que .miraba como injurioso
á
la autori–
dad pontificia- R e probó ig ualmente, que el herej e du'lue
<le Ha novcr fu.ese heclw elector del imperio;
y
lo
dccla.ró: