DISCURSO DEL DOCTOR F. AUGUSTO SALAMANCA
RELATOR DE LA TERCERA SECCIÓN.
Excmo. Señor Delegado., Iltmos. Señores, Señor Presi–
dente. H onorables Representantes, Señores
y
Se–
ñoras:
Cuan g ra nde aparece el Perú, con la reunión de esta
augusta AsatT.blea.
Contemplar á un pueblo que se pone de pié
y
se reu–
ne para trabajar en labor común por los grandes nego–
cios de su sacrosanta Religión, es prenda segura de próxi–
ma rehabilitación.
Hasta aquí habíamos visto, señores, congregados
á
los
peruanos por la política, ó algún otro móvil egoísta
y
transitorio; pero, es ahora un interés grandioso y perma–
nente, el interés de la Religión el que preside vuestras
deliberaciones.
Defender los derechos
y
libertades del Catolicismo;
ocuparse de la prensa
y
propaganda católicas;
y
tratar
de obras de educación, caridad
y
piedad cristianas: tal ha
sido, en resumen, el magnifico objeto
á
que habéis dedi–
cado los trabajos de este Congreso.
De ellos, las obras de educación, caridad
y
piedad cris–
tiana, estuvieron señaladas para la Sección tercera;
y
en
nombre de ella tu ve el honor de proponeros en la sesión
del Jueves, cinco proyectos que merecieron vuestra en–
tusiasta aprobación.
H oy cábeme de nuevo el altísimo honor de venir á
hab] áros en nombre la misma f:!CCÍÓn tercera, )" propo–
ner á vuestra ilustrada consideración otros once proyec-