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MARTES SEGUNDO
y tambien el solo que jamás se emplea sin fruto. Con–
sidera el dia de hoy en quién debes emplear tu zelo, y
cuáles son sus calidades.
i
Velas sobre toda
tu
familia,
sobre todos tus domésticos,
y
sobre las personas que de–
penden de ti?
i
Eres tan cuidadoso, tan vivo en exigir–
les que cumplan con las obligaciones que les impone la
religion, como las que te tienen
á
ti? No les aguantarías
una mala ra'zon , una falta de respeto.
i
Tienes el mismo
zelo respecto de Dios?
i
Responderias de la salvacion de
los que están baxo de tus órdenes?
i
no te fias demasiado
de su buena fe?
·Í
no dices que tienen bastante edad para
no ignorar sus obUgaciones? iDiscurres del mismo,modo
cuando se trata de
tu
servicio? Ten zelo; y no serás tan
indolente
y
descuidado : desde hoy mismo observa las re–
glas siguientes :
1
Que la primera leccion de tu zelo sea el buen exem–
plo: no hay naturaleza, ni humor, ni hábito, ni incli–
nacion , que no se rinda
á
esta especie de instruccion.
2
Observa muy por menor la conducta de tus hijos,
y
de tus domésticos: infórmate de tiempo en tiempo si
sus conversaciones respiran honestidad, y si toda su con–
ducta es cristiana. Sabe si frecuentan los sacramentos : si
rezan y oran todos los dias por tarde
y
mañana , si leen
libros contrarios
á
las buenas costumbres, si están con res–
peto en la iglesia, si frecuentan casas
ó
lugares sospecho–
sos, si se juntan con malas compañías. No toleres este
géneTo de faltas. No te fies en que les has puesto precep–
tor ó ayo.
·
·
3 Sé rígido, sin ser amargo ni austéro : jamás reprendas
con términos injuriosos; ni agrios·: un poco de viveza
y
mucha entereza no parecen mal en ,el zelo : haz que se per
suadan todos que
tú
zelo es
cristiano~
y
por consiguiente
inseparable de la caridad.
,
4 . Si estás
á
la cabeza de algun cuerpo
ó
de algu–
na comunidad, tennzelo po.r la obs€rvancia regular: no
permita~
la menor relaxaciou , pero amonesta con sua""
vidad, corrige con moderacion y con buen modl'J: 0bli–
g_a con tus palabras, y mucho mas con tu exemplo. ¡Cuán–
tos superiores serán castigados en la otra vida por no
haber ido bastante rígido , ó bastante exemplares!
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nada..., que
_ repr~nde1· te -
sobre este punto? Si eres
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