Table of Contents Table of Contents
Previous Page  177 / 356 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 177 / 356 Next Page
Page Background

DE CUARESMA.

167

ganado sino esto, se puede decir, que-delante de Dios, que

juzga sanamente de todas las cosas, se ha perdido el tiempo.

No hay condenado que no estuviera pronto

á

dar to–

dos los reynos, y todos los bienes del mundo, si fuera due–

ño de .éllos, por tener un momento de aquel tiempo que

perdió en vanos entretenimientos, y que nosotros no em–

pleamos mejor. Sin embargo, es una verdad de fe, que en

cada momento que no hemos empleado en agradará

Dios,

hemos perdido mas que si hubiésemos perdido todo el uni–

verso.

Lo que los santos no podrán hacer en el cielo por toda

la eternidad, con todos los actos mas perfectos de las ma–

yores virtudes, que es merecer un nuevo grado de la glo–

ria, puedo yo hacerlo cada instante con un solo acto de

amor de Dios.

Lo que los réprobos no podrán hacer en toda la eterni–

·dad con sus lloros, con sus pesares, sufriendo los mas es–

pantosos tormentos, que es aplacar la ira de Dios, y ob–

tener el perdon del menor de los pecados , puedo yo hacer–

lo

en cualquier momento con un suspiro, con una lágrima:

puedo

á

toda hora, con un solo acto de contricion perfec–

ta, obtenet el perdon de todos mis pecados.

Y qué, Dios mio,¿ la feliz

ó

desventurada eternidad ·

depende del buen ó mal uso del tiempo? i.nuestra salva–

cion no se puede obrar sino en el tiempo? Así es; pero no

obstante estar determinado el número de estos días, y que

nada pasa mas apriesa que este tiempo, hay gentes que no

emplean este tiempo sino en bagatelas, que no saben qué

hacerse, que no buscan sino en qué pasar, en qué gastar,

y

cómq

perder este tiempo: ¿y no soy yo de este número?

¡Ah, Señor! ¿en qué he empleado yo el tiempo que me

habeis dado? Ay! mis mas bellos días se han pasado y se

han perdido: el dia está ya para espirar, la noche va

á

ve–

nir

y

está ya cerca. ¡Qué fondo de reftexíones, buen Dios!

Pero al mismo tiempo,¡ qué fondo de pesares, de temores

y

arrepentimientos!