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TERCERO
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g áudenr
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casa
00\'0Ca
a
Jos amigos
y
Ve–
domum cón'lfoi:.;t
amf.:or,
8
i-
cino- , di ie'.ldo :
1
:_r ráo
ron–
cinr; r , di cenr
illi.r : Cr¡ ngrat u-
mi go, porqu
encoot r¿
mi o \· -
lámini 111ihi qu ·a
i n ~
1
én i
ovem
ja qu"
e habi a p
rdido .
Os
di–
mezm, r¡u«J
per fe rat.
Dit'O
vo-
go
~
que de la mi sma ma
1cra
se
bis
,
q1dd i ta g áudium erit i n
ha rá ma al gr!a en el ci clo por
cado
supe r
uno p ecc::ztóre pami-
un p'" c· dor que hace
p
nit ncia,
t ént i.11n
agénte
,
q1dm
super
que por nov nta
y
nu
v
justos,
nona
fri ta
1lovem
j i..s1is
,
qui
que
no necesi tan de
p
nit
n
ia .
non
indigent p a:n i1éntia.
Aut
¿
O
que
m11ger
teni endo diez
qu:c
múlier
haben.r drachmas
monedas , si pierd
una , no
en–
decem , si
p er clíderit drachmain
1
ci
nde una l uz ,
y
barre la ca–
unam, nonne accénáit lucérnam ,
sa ,
y
bus ·a
con
d iligen ia hrts–
S
evérrit
dornum ,
S
qurI:rit
ta
encont rarla ?
Y hai\i
' ndola
en–
di!igent er , donec
invéniat ?
Et
centrad
, convoca
a
las
am t~.
·
~
cum i nvénerit cónv ocat
amicas,
y
veci nas , diciendo : Al e· ráo:a
S
v id nas
,
dicens: Crmg rat u-
conm i ~10,
porqu encontré la mo–
lámirii mihi ,
qui.l invéni
drach-
nedJ. que
habia
perdido. De la
mam
,
quam
p erdíde ram.
I ta
misma manera os digo que habr:
di co
v obis,
g áudium erit
coram
regocijo entre lo
ángeles de
ángeJis
Dei
super
uno peccató-
Di os po r un p cador que hace
re pamitént iam
agénte.
penitencia.
MEDITACION
D el gozo que causa en el cielo
la cohversion
de un pecador.
P U N T O
P R 1 M E R O.
r
Considera que
quizá no
hay
cosa
de mayor cons1·elo
p a ra los pectLdores , de may or p ovecho, ni que .leba
exci tar ma
su confi anza
y
acele rar su conversir " , que
la
parábola del evangelio de este día. H abía m!' rufestado
e l
Sal vador en bastan tes oca iones
su
bondad
l
su agrado
para
con los pecadore ;
la
impaciencia , digámoslo así,
que
tenia po r verlos conver tidos ,
el
deseo de su salva–
cion ., sus
palabra ,
sus obras , sus parábolas, todo demos–
traba unas eatrañas de misericord ia en este divino Sal–
vador. No he ven ido
a
llama,. d los justos , sino
el
los pe–
cadores, decia : los
que
est:ín buenos no tienen necesidad
de méú1co , los re
nc'-'ios son
para
los
enfermos. Si el
Sal-