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DEVOTOS.
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res, continúa el mismo Padre, y las primeras yemas
Dia XXVIII.
de Ja Iglesia, que
el
ardor de la mas cruél
pa~ion
hi-
zo brotar en medio del invierno de la infidelidad , y
que se las llevó
el
yelo de la persecucion:
FloresMár-
tyrum,
&
primas erumpéntes Ecclésite gemmas, quas
in médip infidelitatis frígore emórtas, persecutionis
prulna decóxit.
Felíz ódio del mas bárbaro Rey, ex-
clama el mismo Padre; mas ventajoso has sido
tú
pa-
ra estos niños, que lo hubieran sido los mas señala-
dos favores del Monarca:
Ecce profánus bostis mím-
quam beátis párvulis tantum prodesse potuísset ob-
séquio, quantum prófuit ódio.
¡Qué dicha
la
vuestra,
inocentes víB:imas, dice San Cipriano, ser confundi-
dos con Jesu-Christo, y arrancados del pecho de
vuestras madres, para ser degollados en su lugar! Ha-
beis sido
bautizados en vuestra sangre, dice San
Chri...
sólogo, corno vuestras madres lo fueron en sus lágri-
mas. Estos son los verdaderos Mártires de la gracia,
que confiesan sin hablar, que mueren
y
triunfan sin
conocer el precio ni
el
mérito de su viétoria. Dios os
guarde, Flores de los Mártires , canta
el
Poeta -Pru-
dencio, que al nacer el dia habeis sido robados por
el perseguidor de Jesu-Christo, como aquellos tier-
nos botones de
las
~osas
, que un furioso torbellino
se lleva quando empiezan
á
abrirse
y
desplegarse.
Si
me preguntais , dice San Bernardo, por qué acciones
merecieron ser coronados estos Santos Inocentes,
pre~
guntadle
á
Herodes, por qué delitos fueron conde-
nados á muerte.
~La
bondad de Jesu-Christo, Salva-
dor nuestro , tendrá menos poder que
la
malicia del
cruél Herodes, para que ésle haya podjdo quitar la
vida
á
unos
Inocentes,
y
el
Salvador
no
haya po-
di-