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DEVOTO S.
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Tertuliano: Mirad cómo
se
aman
y
quál
es su cari·
DE PENT.E–
dad , pues llega hasta estar prontos
á
dar la vida cósTEs.
los unos por los otros:
Vide ut Ín'Vicem .re díligant,
ut
&
pro altérutro tnori sint paráti.
Esto mismo lo
hemos visto en estos dias en la persona de esos
Héroes Christianos ,
á
quienes los horrores de la
muerte no han podido impedir el que expusieran
su vida por la salvacion de sus hermanos ,
á
quienes
el fuego del mas horrible contagio ponia
á
peligro
de morir sin los socorros espirituales. ¡Qué lexos
están de esta caridad christiana los que no quieren
dar ni aún lo supédluo
á
sus hermanos extremamen-
te necesitados
!
Qui habúerit
.rubstántiam hujus
mundi
,
&
vÍderit fratrem suum necessitátem habé-
re,
&
cláttserit víscera sua ah eo; quómodo chári-
tas Dei manet in eo?
El hombre que teniendo bie-
nes temporales, ve
á
su hermano en necesidad ,
y
tiene el corazon cerrado para con él <cómo puede
tener en sí el amor de Dios? Ricos del mundo , que
sois tan duros para con los pobres; Grandes del
mundo , que consumís en el luxo , en espléndidos
banquetes , en caballos
y
en muebles soberbios , lo
que bastaría para que no
mu~eran
de pura miseria
una infinidad de desventurados,
y
para hacer
felíz
una multitud prodigiosa de familias pobres , que
perecen por no haber quien las socorra,¿ pode is
li-
songearos de tener
la
caridad christiana? ¿y sin
ella
hay
razon para esperar salvaros
?
Grandi.r culpa,
dice San Ambrosio,
si sciénte te, .fidetis égeat
:
es
una
culpa grave
el
no asistirá
uno
de tus hermanos;
que sabes está
en la
última miseria
y
en una
extre-
ma pobreza.
Con..