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DIA
IV.
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mor de Dios. Asaltóle una fiebre maligna ,
y
combocado
el Clero,
y
Pueblo , hizo que se le llevase á Ja Iglesia de
San Vicente Mártyr, Parroquia permanente hoy en Sevi–
lla, donde envuelto en un cilicio, rociado de ceniza,
por · los Obispos Juan de llipa ,
y
Esparcio de Itálica,
como otro penitente David , elevadas las manos ácia el
Cielo ', pidió
i
Dios perdon de
sus pecados con
nna
oracion tan tierna ,
y
afectuosa , que conmovió á los cir·
cunstantes
á
derramar copiosas lágrimas ; pero recreado sa
espíritu con una vision celestial ·, despues que hizo
á
to–
dos una exhortación propria de su zelo, entregó su al–
ma
en manos del Criador en
el
di
a
4
de Abril del año 6
3
6.
haviendo governado su Iglesia cerca de
40
años. Apénas
e~piró nuestro Santo, se cubrió de luto toda la Ciudad , Ilo–
ráron los Obispos
á
su Xefe , los Príncipes
á
sa Preceptor,
los Clerigos
á
su Doctor ,_los Monges,
y
Monjas
á
su Rec–
tor ,
y
Maestro ,
y
los pobres , viudas , y pupilos
á
su
Padre y defensor; bien que queriendo el Señor templar
la pena de aque
neblo "nconsolable, manifestó
b
gloria
de su siervo cot sefiales
isibles , como fnéron
el
que des·
pidiese su cuerpo
un
olor
s~1avísimo
como
el
de los mas
fragrantes aromas: el que sanasen no pocos enfermos de
diferentes accidentes con solo su contacto :
y
el manifestar
á
muchos su snqida
á
los Cielos entre una n1ultitud de
Angeles, que le llevaban con c:nticos de júbilo,
y
alab1n–
zas : saliéndole
á
recibir
J
esu-Christo entre una comitiva
in.1umerable de Espíritus Celestiales.
Su venerable cadáver fué sepultado
en
la Iglesia de San..
ta Justa y Rufina, junto á los
de
sus Hermanos Leandro,
y
Florentina, donde se mantuvo en suma veneracion hasta
el
año
ro6 3 ,
que fué trasladado
á
la Ciudad de L-eon en
tiempo de Don Fernando
l.
de Leon , quien salió
á
recibirle al Rio Dnero con sus hijos Sancho , Alfonso,
Garcia, Elvira,
y
Urraca;
y
conduciéndole
á
pie descalzo,
al
entrar
en
b
Ciudad sobre sus reales hombros, com()
otro David el Arca
1
del Testamento , acompañado de
muchos Obispos, Abades , Clérigos,
y
Monges con cán–
ticos de Himnos ,
y
Salmos , se depositó
en
la Iglesia de
-
San