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Enero.
EXE(j{_C ICIOS
M E DITA CIO N
'
DEL.A INCERTIDVMBRE DEL.A HORA
de
la
muerte.
,,
PUNTO PRIM E R- 0.
C
Oníidera que todos dbmo ciertos que h mos
de morir; pero todos ignorimo qual
r
rá
la ho–
ra
de nueíl:ra muerce . Lo Único
que
Ctb mos ciert:tmcn–
re , es , que podemos morir en qualqu iei:
hoc1 ; qu · fl:e
dia puede íer el úlcimo de mi vida,
y
que la hora pre–
fc
qce puede Cer la hora de mi muerre.
P
rfi1adidos
a
efl:a
verdad in.falible, en qué fundJ.mos nueíl:ra fegurid .td?
Cr er ,
y
no temer ; rem r,
y
no ve!
r,
qué pucd
fer fino impi dad
o
lo ura ?
~é
!
A
tod.1 hora s
pue–
de lleg:tr
el
Juez fupremo p:irJ. de idir
d
nueíh.i
ílt
r–
te eterna,
y
no eíl:á.n bs cuencas prevenid.t
!
Segura–
mente no es tiempo de difponerlas quando llegue la
hora de darlas.
D
fpcrrar quando el
Am
llama
a
la
puerca ,
y'
e
fu
r.i de tiempo : ra m neíl:
·r
fl::u· en
cla ; er:i. men íl: r
eíl:~r
a
pr venido p:
i.rapartir
i
era
meneíl:er tener encendid;¡.s
las
lámparas quando
11
gafe
el Efpofo. No es entonces tiempo de ir a b 1fcar el acey–
t ;
ni
~:i.mpo
u
baíl:a tel'ler · roviÍton de ole
,
l1
eíl:á
4p.1g;td:i la lam?ara. M n íl:eres efütr úempr en e(bdo
d
gra
·ia,
v·br fin
e
far ,porqu
:1
no
fc
r afi ,corrémos
ev1
ence
eligrn de er forpr he ndi do .
Q!.lntos
:-rilo
ha qu yo
m
hallo
n
{la
di
hoíi
a ifpoficion
?
Podrá Dios
nir quand
fuere ervido;
~n
1.1
fegunda , en
a terc
ra vigilia, como en la prime–
ra? Hall r' m pr
Y
nido par:i
oro
ar
r
n
fu
pre
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