LA PROPHECIA DE ISAIAS.
te , et audite
vocem meam :
fi–
liae confid en tes, percipite au
ri–
b us eloquium meum.
IO
Post dies enim et annum,
vos con tu rbabimini confidentes:
consumma ta est
enim Vinde–
mia ,
collectio ultra non veniet.
11
Obstupescite, opulei:itae,
contur
,mini, confidentes : exui–
te vos ,
et
confund imini , accin–
gi
te lumbos vestros."
.i2
Super ubera plangite, su–
per Fegione desiderabili , super
vinea fe;tili.
I3
Super humum Populi mei
spi nae
et
vepres
ascendent:
z
q
uanto magis super omnes do–
mos gaudii
Ci
vitatis cxultantj s?
14
Domus
enim
dimi~sa
est ,
mul itu
U
rbis relieta est,
tenebrae
et
palpatio factae sunt
opu!~ntas,
en la!
qoe se
pueden. entender
las Ciudades mas ricas ,
las Synagogas
m as ilustres , y
las mas pr·
.i p ales ma–
tronas de toda la Judea ,
a
as quales ex–
hort a a que se conviertan a D ios sloce–
ramente , ponieodoles d e lante l as m ise–
rias a que seri reducida s u infe liz Patria.
Esta Prophecia , segun S. GERONYMO
y
otros I nterpretes , mira a la u ltima de–
sol acion de J e rusalem por Tito y por los
Rom anos : lo
~ual par~e
insinuars e con
mayor expresto n en
er
v.
" Que confi.ais en vuestras riquezas.
2
Algunos toman esta epoca
a
la le–
tra. CALMET. O tros con VATABLO: Des–
pnes de
u.n cierto t iempo
esa vuestra con–
fi aoza se os convcrti ra en espan to , os ve–
re is e n
la
m ayor congoj a quando la tierra
de J
J1.
sea vendimiada
y
despojada
de
sus
r ado res , porque todos , o perece–
rin
al cuchillo, a l fuego y al hambre , o
serao ll e vados cautivos.
s
D e _v ues nos mas preciosos vestidos,
p ar a que seao despojo de los vencedores;
y
cub iertas d e co nfu sion recoged vues–
tta5
r opas
1
para c aminar
y
estar prontas
taos'
y
aid mi
voz
: ·hijas
conna–
das
1
,
percibid en vuestras orejas
mis palabras.
10
Porque despues de dias
y
de afio
z
,
vosot ras q ue con:fiais
se–
re is conturbadas: pues·
se
acabo
la
vendimia,ni vend
ra
mas
la
cosecha.
Ir
Estremeceos , o puleotas,
ternblad, confiadas : desnudaos
3,
y
avergonzaos , cefiid vuestros
lomos.
12
Llorad sobre vuestros
pe–
chos
4 ,
sabre
la
reg iori deleyto–
sa, sobre la vina fertil.
13
Sobre la tierra de mi
Pue–
blo espinas y
zarzas subiran:
2quanto mas sabre todas las casas
de placer de laCiudad
de
regocijo
~
14
Porquelacasa hasido'a ban–
donada
s,
la
muchedumbre de
la
·Ciudad ha
sido
desamparada ,
ti-
a obedecer las 6rdenes ,
y
aun las insi–
nuaciones de vuestros nuevos sefiores.
4
MS.
9.
Llanet
,
' endechad.
Llor;icl
y
endechad sobre los que cri asteis a vues–
tros pechos. Vease S. MATHEO
xx1v.
19.
Otros : HeriJ vuestros pe c:.: hos de pe–
na y de dolor : lloi-ad sobre vuestra ama–
d a P a tri a , semejante a un a vina fecunda
y
bien cultivada : llorad sobre la -tierra
de mi Pueblo , que q uedara inculta ,
y
se li e nara tod a
d
.~iu as
y
de z a rzas-;
y
sobre fod o llora r
sa Ciud ad que ahora
Se
Ve
tan ufana ;
y
t ambieo todas
SUS
Ca–
sas , en d onde a l p resente no se oyea
sino voces de contento y de a legrla.
s
Esa Ciud ad , en que yo
t<= nia
mi
r es i e nci a , q uedad. abando nada: esa Ciu–
d ad de un Pne blo y concurso t an nu- .
~ meroso
' sera reducid a a un desierto ;
y
entre
SUS
ruin as
Se
veran horribl e -':.;aver–
llaS
c ul;>i e rt as de tini ebl as p alpab e s , en
donde se recoged.n y
abri ga rin asnos
m on teses , y
SUS
Campos serviran unica–
mente para dar pasto
a
los g a nados
.Pa–
ra
siempre.
Todo lo qual d e not a
que
se
habla
aqu!
de l a
ultima
ruina
de
J
er usal em.