...
0
LA PROPHE I
Lu it , et elangui t terr :
on
u
t
L ib nu
et ob o r–
ui t
et faB:
u estS ro n
icu t
'
d se r t ucn :
t
conCi.lSa e t B
·an
et
armelus.
io
unc consurgam , <licit
D ominu
: nunc exaltabo r , nunc
$Ublevabor.
11
C ncipietis ardorem , pa–
ri e ti
stipulam : s piri tus vester
ut igni vorabit vos.
12
Et e runt Populi quasi de
incendio cinis , spinae congre–
gatae ign·, cornburentur.
l
Audite qui
longe estis,
quae fecerim , et cognoscite vi–
cini for titudinem meam.
14
Conterr i ti sunt in Si n
p eq:;atores , possedi t tremor
hy–
pocritas :
G
q u·. poterit habi tare
de vobis cum igne devorante
?
z
quis habitabit ex vobis cum
ardor ibus sernpitern is ?
15
Q ui
0
ambulat in iustitiis,
et loquitur veritatem , qui pro–
iicit
avaritiam ex calumnia , et
• En
vista de esta insolencia
y
ati'e–
•imieoto t ao sin medida ,
~
que es lo qoe
<>S parece que dice el Seno r? Me levao–
tan~,
d ice,
y
OS
h
re CODOCe r
lo
qoe pue–
d e la fu erza de mi brazo.
Y
as! esos vues–
tros altivos p ens amieoto
y
d esignios que
tra lais
formados de pasar
a
re
y
foe–
go toda la Judea , se convertirio en es–
topas que vuesrro mismo aliento encen–
.deri, para qoe
os
devoreo
y
reduzc
n a
ecn izas , como son las que qoedao d espues
d e uo g rande iocendio;
y
como espinas
y
z arzas, que se recogen
y
jontan en haces
para
sirvao de pabulo a las llamas.
s
1
Hebreo :
Ca l quemada.
3
El
casti go
t erri ble
y
estrago que
yo
h are en los As, y rios , despe rtara
y
llenari
d~
asombro a algo nos J udlos hy–
p oeritas e impios. M as yo
le~
<;lire
al co-
a
p
Mlmo XIV.
'
.
DE IS
IAS.
9
Llor '
y
desf: ll ecj
ra: on und ido
e
t ' el
(b n
envileci
0
,
y s
ron
se
h
rna-
d o como u n de · ierto :
tr me-
c icS
e
Ba ' n y el Ca rmelo.
IO
Aho r me le
nta r
1
di–
ce el Senor: ahora s re e ns lz -
do) ahora sere en r nd eci o.
11
Cone birei ardor , p ri–
r ei ari ta
: vue tro
spfritu os
de vorara como fue o.
I 2
era n lo Pueblos corno
cen iza de un incendio
2
,
como ha–
ces de espinas ardera n al fuego.
13
Oid los que estai
lejos,
lo que h e hecho, y conoced los
cerca nos mi fortaleza.
14
At r rados ha n sido los pe–
c ado res en Si6n
3 ,
t emblor tom6
a los hy p6critas: z.quie n
e
vo
o–
tros podra morar con el fu ego de–
vorador? z.quien de entre vo
t ros
morara con los ardores eterno ?
15
Elqueandaenju ticia , y
dice verdad , el q ue desecha la ga–
nancia que nace de la calurnnia
+,
r azon : Mirad , este fuego no cs inas qoe
una sombra de! que esra aparejado para
que en
61
sean eternamenre acormentados
todos los reprobos.
E
carmenrad pues, o
p roqaos a ver si c ausandoos t anto horror
esto ' poco que ha
· visto, pod reis su–
frir aq uellos ardores qoe o uoca t endd.n
fin .
Todos los males tempor !es son na–
da, en comparacion de los eternos que
p adeceo los reprobos en el inficro o .
1
l
qoe ie horroriza de aquellos,
huya
de}
p eca
0
'
que precipita al repro
0
mu ha•
v eces e n los temporales ,
y
siempre e ir–
r em diablemente en los eternos.
4
Aerecenra r riquezas con in ju
· ias,
y
calumniaado
a
las inocentes .
P or no
oir sangre
,
l as voces de
la
came
y
de
la
sangre.
P or no ver lo m alo;
manifest ndo
con csto el horror
qae riene al pee
do.