C A P I T U L 0 YXX I I I .
2
95
glo ria t ua. In die con umrnatio–
ni
dieru rn vi t ae
t uae , et in
tempo re exi t us t ui dis tribue he–
redita tem tuam.
25
C ibaria et
nus asino : pani
et opus servo.
virga et o–
et disciplina
26
Operat ur i n disciplina, et
quaerit requiescere : laxa manus
illi , et quaerit liber ta tem.
27
l ugum et lorurn curvant
collum durum , et servum incli–
nant operationes assiduae.
28
Se rvo' malevolo
tortura
et compedes; mitte ilium in o–
peI'ationem , ne vacet:
29
Multam enim malitiam
d ocui t otiositas.
30
In opera constitue eum:
sic enim condecet illum. Quod
si non obaudierit , curva illum
cornpedibus , et non amplifices ·
super omnem carnem : verum
sine iudicio nihil facias grave.
31
Si
a
est tibi servus fide–
lis , si t
t ibi quas i anima tua:
quasi · fra trem sic eum
traCl:a:
quoniam
in
sanguine ammae
comparasti illum.
1:
Permitiendo que tengan la autori–
d ad sobre
t1
aquellos
~.
quienes debes
tu
mandar segun tu estado . E n el Gri ego
se lee despues de esto e l t itulo :
?re pl
J'ov .Awv
,
de los siervos.
s
C onvienen es tas cosas al asno.
3
Si se le ti ene a raya ,
y
se le hace
t rabaja r
~
no piensa en otra cosa que
t)l1
ha llar un poco de t iempo para poder res–
pirar
y
descansar. El Gri ego f'.pya crcn
EV
?t'Cl'.l<ll
,
'Ital
eiJp~ O"E IS
a v a 7t"etVO"IV
,
haz
t rabaj ar al siervo
,
y
hallaras rep oso .
~
P ero todo esto ha de ser con mo–
d eracion
y
con
prud en ci~
, no exced ien–
do en el castigo , ni obligandolos a llevar
a
Supra
V II.
22.
glor ia
1
•
E l d ia de
la
consumacion
de l
d ia de tu
ida , y af
t iem–
po de t u salida reparte tu heren–
cia.
25
P ienso y
palo
y
ca rga
para el a no
2
:
pan
y
ca t igo
y
tarea pa ra 1 siervo.
26
Tra . ja el por mi edo del
a premio
3 ,
y busea holga. : afl6-
xale las manos, y busca libertad.
27 El
y
ugo y las coyundas
doblan el cuello duro , y fas faenas
conti nuas encor van al siervo.
28"
Al siervo maligno tortu ra
y
cormas ; envfale a la obra , pa–
ra que no este mano sabre µJ ano:
29 Porque muchos vicios en–
sefi
la ociosidad.
30
Hazle estar en t area : por–
que as! le conviene. Y si no hicie–
re tu mandado, apremiale con cor–
mas, mas no excedas
4
contracar–
ne alguna: ni hagas ninguna cosa
grave sin juicio
s.
31
Si tienes
tu
un siervo fiel,
mirale como a tu anima
6
:
tra–
t ale como a hermano : porque
le compraste con sang re de t u
anima
7 •
mayor carga que l a que pneden. Y esto
no solamente coo l s
iervos o escl avos,
por la
co oside r~cion
de q ue son hom–
bres; pern ni aun con las mismas besti as.
s
Con el sie rv9 ,
sin juicio
,
sin pen–
sarla b ien p rime ro ; sino coo mucha ma-
d urez
y
p remed i~acion .
,
.
6
Como
tu
v1da , como a
u
m1smo.
7
A precio de tu sa ngre ; porque l?s
primeros escl avos eran los que se caut1-
vaban en la guerra ; de donde
mancipia;
quasi.manu
~apta .
_Y
as! los q u<: los ad–
q uiri an, pod1an dec1r que los habian com–
p rado a precio de su sangre ,
exponie~d.o
su vida . O tros:
En la
sa1~re
de
tu am-