IRMA
L6PEZ DE
C ASTILLA
libros con la de programas de
teatro y de corridas de toros,
esquelas y otros materiales eff–
meros para sobrevivir en tiem–
pos diflciles. Medina do cuenta
de la protesta de Luisa Peralta,
duena de la lmprenta de la Ca–
lle de Juan de Medina, contra
el pedido al virrey, hecho por el
administrador del Taller de los
Huerfanos, de prohibir a los de–
mos impresores de la ciudad la
impresion de esquelas de con–
vite por corresponder a los privi–
legios de la Casa. Luisa Peralta
consideraba tal pretension un
atentado contra la libertad de
trabajo.
No llama la atencion, enton–
ces, el interes que pusieron los
impresores en la obtencion del
privilegio real para la impresion
de cartillas . Si nos remontamos
a las epocas en que Lima, con
sus instituciones civiles y ecle–
si6sticas , pugnaba por el per–
miso de Felipe II para establecer
una imprenta , vemos que una
de las razones esgrimidas por
la universidad y el cabildo era
la necesidad de imprimir car–
tillas para los ninos. El negocio
debe haber sido muy lucrativo,
ya que hubo imprentas que se
dedicaron casi exclusivamente
a tal actividad . Suposicion que
se refuerza con la c onstatacion
de los atones de los impresores
por obtener su privilegio.
De la obra , ya ci tada, de Me–
dina destacamos a los impreso–
res que dieron mayor importan–
cia a la impresion de carti llas y
por lo tanto a la obtencion del
privilegio: Jeronimo de Soto Al–
varado, quien lo habfa venido
solicitando desde
161 6
c uando
46
Rodericus Sanctus
de Arevalo
{1415) .
Speculum vile humane.
Basifea: Martino Flechen.
Joyas de la Biblioteca