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Benemérito Sr. Jcneral Gobernador Litoral.
CaHao 8 <le l\farzo de
184~.
La
ereccion
<le
los establecimientos
de beneficen–
cia
t.icno
por objeto
aliviar la humanidad doliente: aun
en tieinpo
de barbarie,
y
cuando
los
habitantes de la
tierra, apenas salidos de la infrmcin,
faltos
de ilustra–
cion
y
de experiencia
practicaron es1a
relevante virtud,
ella es, sin
duda,
nacida con el hombre, por eso ha
ejercido un influjo
tan poderoso
en
el
corazon
de todos
los
seres
racionales. Por
eso tan1bicn
?os gobiernos de
todas las edades han dispensado con
jenerosicbd
á
esos
establecirnientos de 111isericordía la proteccion que de–
mandaban los beneficios jenerales de
Ja:
comunidad,
muy
en particular para
aquella
porcion indijente que
carece de asilo en la triste situacion
á
que los
redujeq~
_
las dolencias de sus enfermedades. Bajo de
tan
saluda–
bles auspicios se han
erijido
en tedas partes
infinitos