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L

as

empresas

-

país y

la gran

T

ransformación

el desempleo y la gran corrupción. Es necesario levantar la valla.

Estas luchas deben fijar como objetivo el gran cambio, la Trans-

formación.

Hemos olvidado que, en una cierta época, quien se apropiaba de la

tierra cultivable se convertía en el dueño absoluto de la totalidad

del resultado del esfuerzo de todo un pueblo. En aquella época,

como contrapartida, los amos brindaban alojamiento y comida a

los trabajadores y sus familias. Actualmente, con una nueva forma

de trabajar que utiliza los intercambios en precios expresados en

unidades monetarias (proceso artificial de producción), el aloja-

miento y la comida que fue entregado en términos físicos, hoy se

entrega a los obreros en términos monetarios (salario).

Por eso es que, actualmente, los nuevos amos ya no se apropian la

totalidad del resultado de la actividad económica. Tienen el control

sobre la totalidad del resultado, pero están obligados a pagar el

salario de sus trabajadores, quedando con ellos el

Resultado Neto

de la actividad económica. De ahí que, en economías de mercado,

los amos modernos se apropian la totalidad del Resultado Neto de

la actividad económica generado por todo un pueblo. Es decir, se

apropian la totalidad de las ganancias, o utilidad, de sus empresas

[Valor agregado – salarios = Resultado Neto (ganancias)]. Es así

cómo,

en Repartición Individualista, el propietario de la empresa,

o sus accionistas, se apropian del 100% de las ganancias, fruto del

esfuerzo de todo un pueblo

. Esto es lo que llamamos Repartición

Individualista del resultado neto de la actividad económica.

Sin embargo, surge una pregunta. Si este comportamiento es uni-

versal en una economía de mercado, ¿cómo es que existen empre-

sarios y empresarios? Es decir, si los propietarios de las empresas

se apropian del resultado del esfuerzo de todo un pueblo, ¿cómo es

que existen miles de empresarios que a las justas logran sobrevi-

vir? La explicación radica en que, en tiempos modernos, la Repar-

tición Individualista ha generado un mecanismo de extorsión que