Previous Page  106 / 194 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 106 / 194 Next Page
Page Background

106 —

L

as variables más

importantes del modelo de desarrollo

Con este comportamiento no comprendemos que somos parte de

una sociedad, y que existe una ida y vuelta entre nuestro bienestar

individual y nuestro bienestar en sociedad. Si no dedicamos un

minuto de nuestro tiempo disponible a comprender y resolver es-

tos problemas, ¿cómo queremos que nuestras calles estén limpias,

bien ordenadas? ¿Cómo queremos tener un mejor cuadro de vida si

no dedicamos una fracción del total de nuestro tiempo disponible a

diseñarlo, costearlo y contribuir a su ejecución?

Por ejemplo, en las sociedades de autoconsumo, en donde el dine-

ro no tenía una función predomínate como ahora, existía

de una

manera natural

un real equilibrio entre el trabajo individual y el

trabajo colectivo. Un tiempo dedicado al cultivo de su chacra, de

su casa, y otro dedicado a los grandes trabajos. Sino, ¿cómo se

explicaría la construcción de las pirámides de Egipto o las forta-

lezas Incas sin la participación colectiva, organizada y consciente,

de miles y miles de personas al mismo tiempo? Esas obras no las

puede realizar una sola persona.

Ya no vivimos en sociedades de autoconsumo. Actualmente todo

pasa por los intercambios en precios expresados en unidades mo-

netarias. Entonces, es importante comprender que una fracción de

nuestro tiempo o de nuestros ingresos debemos destinarlo a los

trabajos que requieren la participación de más de una sola persona.

Hay algunos que requieren la participación, física o monetaria, de

todos los habitantes de la comunidad; otros solamente de una frac-

ción de ella.

Nuestra Democracia representativa y participativa nos ha acostum-

brado a “elegir” un representante para que resuelva los problemas

en nuestro lugar; es decir, hemos “descargado” sobre el “represen-

tante” (presidente, congresista, alcalde…) todos los problemas de

sociedad. Para ello le permitimos que nos impongan una cierta tasa

o impuesto con el que se cubrirá los costos de las obras y servicios

necesarios a la colectividad.