Angeles,
y
De1nonios.
337
" sí
mismos
sin orden del Altísimo: el querer
,, aplacarlos
es
ofender á aquel, baxo
cuyas
es–
" trechas
órdenes.
militan ,
y
quien
en pena
,, de
nuestros desvaríos nos sujeta
á
ellos.
Es–
" tos , : siendo
de
una 'naturaleza: malévola , ·
y
" perversa,. en ·ningun caso cuidarát1 de nuestro
,, bienl.; lo que , pues, no pueden hacer te–
,, niendo
el
hombre
á
Dios propicio ,
lo
harán
,, teniéndole
irritado (
1
).
76
.
Es
en esto
de
no poca consideracion
la autoridad de Porfirio, uno de los mas subli–
mes
Teólogos
del
Gentilismo ,
quien expresa–
mente
afirma , que los
malos
espíritus , no so–
lo
se
hicieron adorar como
,Dioses ,
sino
que
ellos mismos cuidaron desterrar el culto - del
Dios
verdadero ,
inventores
de todo
artificioso
embuste,
y
malignidad , para engañar _,
y
per...
vertir
á
las
gentes (
2 ).
La
mentira ,
dice el
mis..
Tom. II.
Y
__
mo,
- (
1)
Isti serilper habent voluntatem nocendi , nec si placen–
tur ,
nec
si. rogantur desinunt nocere velle. Hoc enim male..
volentire illorum proprium est. Ergo quid facies eos colendo,
nisi ut illum offendas , quo offenso
in
istorum potesratern da–
beris , ut qui
tibi
nihil possent facere illo placato , faciant
quidquid volunt illo irato
1 B. Augustin. in Psa/m.
26.
n.
19.
(2)
Infestorum , dremonum art ibus genus omne · prrestigia–
rum efficitur : illosque proptere
1
,
illorumque Princi pem
ma–
lefici homines maxime· venerantur. Quippe abundant enim isti
vaniii ficti$4ue
cecum imaginibui , eoiue
ad
concinnandas
in...
so-