D 1A C XLI V.
Jesus no ruega por el mundo.]
oann.
XVII.
9.
·yo
no rue(O por
el mundo.
No
Joann.xv11.
.
ruego
por
los hombres
va-
9·
nos, amantes de sí mismos ,
que
quieren
parecer
buenos,
y
se en–
gañan
los unos
á
los otros.
No rue.
go
por e)te mundo lleno -de
odio,
de
e~hidia
, de
fiogimiepto.,
y
de
engano ; por
este
mundo " cuyas
maximas son del
odo .
onl:rarias
á
la
verdad ,
á
Ja
piedad .,
á
la
sin~
ceridad , á la humildad.,
y
á
la
paz.
¡Oh mundo
!
la verdad te condena
aquí
!
J
esu-Christo
te exduye
de
5U
caridad .,
ó
por mejor .decir ,
tú
te
separas
de su amor .,
y
te
haces
incapáz
.del grande
fruto de su
ora–
cioo ,
que es
aquella
perfetla
uni–
dad que pide para sus Aposto1es,
y
los demás Fieles.
El
mundo está
lleno
de
corrup.¡,
M
f
c10n,