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mo para arrancar del yugo estrangero el suelo de la patri
usurpado entonces por la conquista.
El General D. Fructuoso Rivera, caudillo influyente en la
campaña, era uno de los jefes que habia aceptado la incor–
poracion del Estado Oriental al Imperio del Brasil, del que
recibió el título de Baron de la Laguna, y
á
cuyo servicio
militar se encontraba entonces.
Sabedor de los planes concebidos por los emigrados se
opuso, en apariencia al menos, al movimiento que se pre–
paraba,
é
hizo, ó quizas se vió obligado
á
hacer, una decla
racion en que protestaba su adhesion
á
la causa imperialista,
publicando el siguiente documento:
MANlFESTACION
• Empeñados los anarquistas en estraviar la opm10n de los pueblos
y
al·
terar el sistema pacífico de los gobiernos, han hecho estampar en
El Argos
de
Buenos Aires núm.
u5:
que el Brigadier Rivera, habia intentado algunas
correrias sobre el territorio de la Provincia de Entre-Ríos, haciendo por otra
parte, correr misteriosamente la noticia, de que cuentan con la cooperacion de
dicho jefe para sus empresas revolucionarias en la Banda Oriental.
" Para desvanecer las invencione> de tamaña impostura
y
satisfacer á sus
sentimientos de honor
y
patriotismo cree de su deber el Brigadier Rivera
manifestar á los pueblos de la Banda Oriental que habiendo adoptado el sistema
de la incorporacíon de esta Provincia, al Imperio Constitucional del Brasil por
un convencimiento íntimo de su estabilidad general,
y
como el ,único medio
que presenta la situacion política de esta parte del Continente Americano para
terminar la anarquía, restablecer el órden, afianzar la segm idad de las propie–
dades, restituir el sosiego á las familias,
y
gozar de una libertad estable bajo
las garantias de un Gobi€rno poderoso
y
protector; jamás su conducta desmen–
tirá este principio rápidamente proclamado por todos los pueblos-que el bri·
gadier Rivera será siempre fiel
á
todos sus compromisos, porque tiene por
base la verdadera felicidad de su pat:ia; que hace votos por la conservacion
de la mas sincera amistad con las provincias vecinas lejos de intentu corre–
rias en sus territorios,
y
que desea vehementemente que nunca llegue el caso
de defender con las armas los intereses de la Banda Oriental, los vínculos de
su nuevo pacto social con el Imperio del Brasil
y
los deberes que exi.;:e el
patriotismo de un buen ciudadano,
y
que la lealtad impone á un militar hon·
rado.
• Montevideo 13 de Febrero de 1825
Fructuoso R i'vera.
Brigadier General Comandan te .
" Imprenta de Arzac. "