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PROCLAMA
Et Presidente de la República
á
la Nadan
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El restableciqiiemto de la paz tan justamente anhelada por todos los ha–
bitantes de la República es ya un hecho feliz á que ha concurrido la iniciati–
va oficiosa y amistosa del Gobíerno Argentino y
á
que ha puesto el sello de
un hecho consumado la ratificacion de la Asamblea.
• Los disturbios de todo género han cesado, y las
resistencias á la autori–
dad nacicnal han sido sometidas mediante un acuerdo de familia,
que sin
coartar en lo mínimo las facultades del PrHidente del Senado en ejercicio del
Poder Ejecutivo, y sin modificar las condiciones políticas de
la actualidad de
la República, estatuye las bases de su inmediata reorganizacion con arreglo á
sus instituciones y á sus leyes.
• Sabia y he tenido
ocasion ya de ver mis
esperanzas confirmadas en la
capital, que el pueblo acepta como una bendicion del cielo Ja paz que se Je
devuelve en los momentos mismos en que mas ruda bramaba la tempestad de
las pasiones, y mas cruenta se preparaba la guerra, y mas cargado se presen–
taba
d
horizonte de complicaciones y peligros de todo género; y por lo mismo
que tenia la voluntad firme é inquebrantable de afrontar todos los peligros en
cumplimiento de mi deber, me asocio al sentimiente público y no puedo me–
nos de agradecer
á
Ja Providencia, y de
aplaudir el patriotismo y la cordura
de mis conciudadanos que me permiten convertir mi Gobierno, constituido
bajo los auspicios de la guerra civil para concluir la jornada por la guerra, en
Gobierno de paz, de reparacion y reorganizacion para la República.
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Si en aquella tarea solo las prescripciones del deber podían guiar
las de–
terminaciones del gobierno, P-n la nueva
fa~
de los sucesos políticos procederé
con el convencimiento de que respondo á una alta mision, y con
la fé y la
decision que dán las mas profundas convicciones.
• Conciudadanos y habitantes todos del pais!
• Una nueva éra se abre h oy para Ja República, éra de reparacion y por
lo mismo de labor y de lucha.
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Llamado á presidir este nuevo período de transicion y á preparar el ad–
venimiento de los Poderes Constitucionales, prometo y garanto solemnemente
á mis conciudadanos y al pais, que solo ejerceré mi autoridad para garantir á .
todos los ciudadanos sin distincion de partidos ni de circulos, el libre ejercí.
cio de sus derechos políticos.
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A nadie negará mi gobierno la proteccion de las leyes y á nada escusará
de su rigor en el caso de delincuencia.
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Cualquiera que sean mis opiniones y mis afinidades políticas, que ningun
ciudadano puede dejar de tener en un pueblo libre, en el ejercicio de las fun –
ciones públicas de que estoy investido y en lo que pueda afectar
á
la igualdad
y
á
la justicia, sólo recibiré inspiraciones del patriotismo y sólo
rendiré ho–
menaje á las prescripciones de la ley.