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.J.OSCRONISTAS DEL PERU
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asegurando unos que fuá Barcelona, otros Sariñena (villa de la provincia de
Hu_qsca), naciendo probablemente a principios del siglo XVI.
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Cue recibió educación esmeradísima y ' cortesana no lo dudamos, ate–
rd~dcnos
a sus escritos, tnuChos de, ellos 'en un latín clásico y
~legante,
fru–
to
·d~
la instrucción humanista renacentista que florada en esta época, donde
.el e-studio de Ccerón y de la Hístoria Antigua era indispensable, conJuntamen–
te que la bratoria y la r.etórica, para formar al hombre libre, erudito y caballa:
ros
o; poseía, además el latín, el italian0 y el francés, fuá colegial en Sala–
m:~
.r.ca,asegurando Schott, Uztanos y Domar, que
estud.ióHumanidades en
compañía de Jerónimo Zurita, autor de "Los anales de Aragón" y otros con
el lamoso Ferhárr Núñez.
En 1542 lo hallamos ya desempeñando un puesto en la Corte Imperial,
-nombrado Maestro de Pajes del Prí,ncipe don Felipe, puesto docente de gran
ca~oría,
según nota del 17 de noViembre· de dicho año y entJ:e los Papeles
de Ara<ión-tomo II,
Más tarde, como asegura Paz y Mella, fué nombrado Cronista Mayor de
Ind1as después de
Gonz~lo
Fernández de Oviedo, cargo de altísimo honor
-y
de mucha confianza, aunque .Gil Gonza.les Dávila lo niega. por la trivial rqzÓn
que no vino a América, aunque reconoce que si se valió de originales
a.ie–.nos supo Ci>rdenarlos muy bien.
Está probado, y fuera de duda,
~ue
todas sus. obras, escritas en el inte–
-Ireqno de 1545 a 151:14, fueron costeadas por la Corona gracias al favor es–
pecial que le dispensó eÍ'Emperadot don Carlos V, y a la iimistad y admirá–
-ción grande que le
deparq.rael por entonces Príncipe don Felipe. Por la va–
riedad y
c~idad
de las obras y por el favor real que gozó, nos. inclinamos a
cre~r
que fué ..efec;:tivamente Cronista Mayor de Indias, o sea Cronista Oficial.
Después de desempeñar muchos puestos públicos de importancia murió
-Ga_lvete de la Estrella en la Ciudad de Salamanca, el año 1593, y fuá sepulta–
do, comQ lo aseqlJra Gonzales
D~vila,
en los claustros del Convento
d~
San
:Francisco de esa ilustre y universitaria ciudad.
El docto cronista compilador Calvete de la Estrella escribió muchas obras
Teferentes a la América y 'a Eapaña, casi todas en 'Latín. Así, en lo que re–
liare a Chile es alabado por el Divino Ercilla, en su canto IV; en lo de Méxi–
co, escribió uná Historia de Hernán Cortés, en lengua latina, pero én lo que
..respe~ta,al
Perú fué más extenso: en 1545 escribió. en verso su crónica ti-tu–
Jada ''Comentarios del Perú",. donde trata de la revolución de don Diego de
.Almagro, el Mozo, y la actuaciói:J. del licenci'ado goberna,dor Vaca de Cas–
tro, que se conserva manuscrita en la Academia de la Historiap de Madrid,
y
se dice que es la que más fama le dió. Urge, pues, la im:nediata publicación
de este manuscrito. Aproximadamente por 1550 escribe "La Revolución de
Pizarra en el Perú y Vida de don Pedro de La Gasea,", en la que utilizó las·
obras del Palentino y las "Memorias" de don Pedro de La Gasea, el Pacifica–
dor;·..así como también cHfa relación de los mismos sucesos, escrita en Sevi-
1la en 1549, por el florentinCD Nicola de
Al~enino,
Y
otra, que se conserva iné-
'
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