JOSE MEJIA
V~
19
rio,
el
que habría de dar origen al régimen amplio de la tri–
bu
y
más tarde al imperio,
ftté
la reunión de una gran fa..
milia de filiación uterina compuesta de tres o más genera–
ciones
y,
por consiguiente, de un número indeterminado pe–
ro numeroso de individuos que reconocían como tronco a la
abuela o bisabuela, se gobernaban por un Inca, nombre da- ·
do al marido de la bisabuela o abuela, que tenía subordina–
dos a los Purics o jefes de ·familia, maridos de las hijas
o ,
11ietas,
y
que en la guerra se sometía a la autoridad de un
Sinche. Los ·vástagos de los hermanos casados con mujeres
de otros ai'llos convivían
en
el
aillo de sus padres, mien–
tras éstos vivían y, cuando morían, pasaban junto con sus
madres al aillo originario de donde estas habían salido para
casarse. Nuevamente tengo que llamar la atención sobre
este error de apreciación social. He tenido oportunidad,
páginas más adelante, de comprobar que la mujer, una vez
salida de su ayllu en calidad de
esposa~
no regresaba como
quiere ·Horado Urteaga sino que, por el contrario, era he- ·
redada por quienes tenían capacidad para ello, de acuerdo
con las reglas del) Derecho Consuetudinario.
Cuando ya·convertido en fratría--continúa el autor' que ·
estoy glosando- es una agrupadón de aillos ligados por el
reconocimiento de un.mismo totem 1que tienen necesidad de
luchar y defenderse eligiéndose jefes dentro de
~os
más dies–
:tro de la parcialidad ayllal : los Sinches. Como se vé, la
organización anterior' subsiste en este cambio de forma so–
cial Los Sinches acaban por perdurar como jefes suP,re–
mos y por fin, subordiñatiao a todos los Purics y aliándose
con parcialidades vecinas, dan origen a la tribu que, en su
avanc.e conquistador, ha de dar origen al Imperio.
En
1942
apareció la obra de ROBEJRTO MAC
LEAN
y ESTENOS, "Sociología Peruana'·', en la .cuál, basándose