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objetivo principal de .la trepanacion el princ1J)10 religioso. Dirt':
"Es muy posible que eslas primilivas trepanaciones, llevada a
cabo con instrumentos de piedra, Lan lo si fucron practicada · pa–
ra permilir la salida de "dcmonio espiritualos" o oomo amulc–
tos, o para cleYal· Jragmcntos 6seos deprimidos por lraumatismo.:;,
no p1'esenlaban morLalidad mayor que en nucstros dfas" ... ''.
En cuanLo a abril' el craneo, para descubrir la zona exil·)–
motora de! cerebra, es verdaderamcnte irrisorio suponerlo, cou–
formc piensan Keen
y
otros investigadores. La mayol'ia de rslas
trepanaciones eran craniectomias parciales.
Antes de afirmar el motivo nervioso, debemos asegurar–
nos si el arte de.l diagn6slico estaba , lo suficienlemente desarro–
llad·o, como para permitir el lujo de diagnosticar afeccion intra–
encefalica, y aun ma:; la localizaci6n. Este clato cae por su pro–
pio peso, de! estudio exhaustivo que hemos hecho de! estado de la
mcdicina. Empirica lai;; mas de las veces;
y
con pocos conoci–
mientos de los prooesos intraencefalicos, conforme hemos vislo
en la seccion "Vocabu.lario"
y
"Palologia", ma! podian hacer diag–
nosticos, que hoy se consideran de finura extraordinaria. Mal
podria practicarse la trepanaci6n en los casos de epilepsia o con–
vulsiones, cuando en el lenguaje popular, era denominada gola
coral o ma! de coraz6n, radicando po1· LanLo su mecanismo pro–
ductor en el corazon (sonko). Aun cuando como afirman in ·
vestigadores, el
sil.iopredileclo de la trepanaci6n eran las regio–
nes arUeriores de.I craneo, no podemos suponer· tenian conoci–
mienlos fisiolog·ico s, pant conocel' las regiones motoras
y
meno·s
el sindroma compresional. Es mas 16gico suponer con Lavore·
ria, que en lo casos de 6rr1Pn medico fue "sorLflega o taumatul' –
gica" sin direcclon patol6gica tl efinida. Hasla acaso podrfa ha·
berse verificado, como afit'ma Posnansky, a manera de sacrif1-
cio, confirmado por la tradici6n folkl6rica. As( existe una tra –
dici6n del altiplano s udamcri cano, que da cuPnta "como los ·a–
cerdoles, durantc cierlas fiestas, absorvian los sesos de .los s:•–
crificados" . Las manifestaciones externas de 6rdc•n nerv.iosfl.
paraliticas, etc. aunque fueran de sede encefalica, han debid1J
scr someLidas al Lratamiento local peimitivo, chupar. ma ·a.jear,
;;a ng1·al';
y
no al pa togcn ico esclarec:iclo actual mente, verdaclcra–
mentc insospechable para la mentalidad primiliva.
Por• todas esLas razones, crcemos, que si la trepanaciun
d1~
6rden medico ha cxislido, no ha sido motivada por procesos
lle–
i'inidos de causa nerviosa, sino mas bien de Mden quirurgico
ex–
terrio.