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EXPLORACIÓN E

INCIDENTES _D_E_VI_A_:J_E_____

hacia N. 0., casi en la misma dit·ección del gran

~amino

de

los Incas, que iba del Cuzco a Quito, cruzando el Apurimac,

· pasando por Abancay hasta Huamanga que hoy se llama.

Ayacucho, y de allí otra vez a Lima.

·

Con más tiempo y medios adecuados a mi disposición,

podría haber extendido mucho más el campo de mi::s explo–

raciones; pet·o en cuanto amiobjet.q principal-laexplicación

de la civilización Incaica por sus monumentos existentes–

los resultados habrían Aido creo, simplemente de mayor acu–

mulación de documentos. t{in embargo t.rnje de regreso más

~e

cuatrocientos planos, seeciones transvet·salas

y

verticales;

casi igual número de bocetos

y

dibujos; un gr

a11 núme

ro de

fot.ografías y una colección considerable de al'tefact.os. Para

el presente volumen, se üa seleccionado lo más importante

de este material que dejará poco que desear· al arqueólogo,

en cuanto a la explicación de los monumentos del Perú.

Estos materiales mostrarán no solamente que existieron

varias ci vilizaciones distintas

y

aisladas en el Perú, sino que

algunas de

~llas

son más antiguas que la Incaica; en t.a.uto

que mis obsem,r ciones sobre la Geogmfía

y

'l'opografia del

País harán ver c6 o los Incas estalllP-cieron su extensa do...

minaci6n y cómo su sabia política de conquista se orig·inó

y

desarrolló. Mis investigaciones creo corregirán mucl10s erro–

res y exage:racione sob re el antiguo Perú

y

conducirán a un

criterio

ju~Sto

y

raciona l, acerca del mejor· Mganizado, del

más sabiamente admiuistrado

y

del más \>'al'tu

lmpt~ no

a–

borígen de América, sobre el que teníamos hasta abora tan

escasos datos para g·uiat· nuestro juicio, co1uo son, lastra–

diciones locales

y

las crónicas de los conquistadores, fre–

cuentemente apasionadas e injustas. Como los Incas no

(~o­

nocieron la escritura, sólo hat1 quedado de ellos rec;uerdos

tradicionales,

y

de aquí que el valor de las

inn~stigaciones

debe apreciarse, no tanto por la capaddad de la ,persona.

que las ha llevado a cabo, sino por el número

y

naturaleza

de los hechos y materiales expuestos.

El Imperio de los Incas llegó al máximun de su poder

y

expansión precisamente en la época dal descubrimiento de

América, en el reinado de Huayna-Ccapac, quién con más

propiedad que Huascar

y

Atahuallpa, podría ser llamado el

último de los Incas. Su padre el Inca Tupac-Yupanqui, ha–

bía extendido sus conquistas por el Sur más allá del desier–

to de Atacama, hasta el río .Maule

an Chile

;

y

al mismo tlem–

po el mismo Hayna-Ccapac había sometM.to el poderoso rei–

no de los Sciris-el de Quito, en el Norte. Desde su dominante

gran meseta central, los Incas se expandieron hacia el Pací-