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LUCHA DE MÉTODOS
cune influence de l'ancien monde sur le Nouveau?"
Por mí parte, debo
confesar, que, en el fondo de mí memoria vísíva, todas las veces que se
me presenta en una viñeta la ornamentación en bajorrelieves del templo
de Buro-Budor, en Java, dividida en varías zonas horizontales, suscíta–
seme el recuerdo de los bajorrelieves más familiares de Palenque
y
Chi–
chen-ltza. Es ésta una corriente espontánea de "simpatías
y
correlacio–
nes", que no quiero ahora examinar,
y
que cito tan solamente para que
resalte
la
habilidad con que el Prof. Germain ha elegido un ejemplo
irresistible ( 11) . Lo que no puedo permitir, es el juego de palabras,
( 11) La semejanza en la ideación, disposición, construcción y ornato de los
edificios monumentales de la América central y los del Asia Sud-Oriental, así como
en el empleo del arte escultórico y de motivos plásticos, es para un observador impar–
cial seguramente más convincente que la analogía con Egipto.
En primer lugar, hablando de "sensaciones" estéticas, no se experimenta, al com–
pararlas, la impresión de una
facies
artístico-sentimental completamente "nueva", como
debe experimentarla el viajero que deja el templo de Karnak o la alameda de las Esfinges
para trasladarse al medio de los
teocalli.
En cambio, comparando Java y Cambodge,
con América Central, se advierte un aire común, ya a la sola visión panorámica.
Pero, como esas impresiones, siempre superficiales, pueden a veces ser causa de
errores, sacamos de Lewis SPENCE el cuadro
analítiGo,
en que este autor ha reunido
las condiciones que - al ·n y a cabo - son la causa de dicha impresión.
En ambas regiones monumentales, pues, el tipo predominante es una masa en
forma de t onco de pir-ámide, a
~uya
plataforma se sube por cuatro escaleras de
piedra, siempre muy escar adas, y puestas en cada uno de los Guarro costados; las balaus–
tradas son idénticamente modeladas con imágenes de serpientes; en la cima de
la
plataforma está s{tuado e templo p opiame:nte dicho. En coanto al templo, idéncica pro–
fusión de
ornos y rehe_v:es en las murallas, cuya naturaleza ornamental y de construc–
ción es ana oga; en ambas zonas se emplean estatuas-cariátides; por fin el techo en forma
de palomar qo remata el templete presenta una semejanza sugerente.
SPENCE, Lewis. -
The origin of American Man,
in
"The Quarterly Review"
N.º
484,
(1925, April) , pp. 299-316.
Tanto si se quiere sornar numéricamente las semejanzas anotadas, como tener en
cuenta el aspecto integral de los monumentos, es muy evidente que hay mayores y
más numerosos motivos para establecer el paralelo entre América Central y el Asia
Sud-oriental y no el otro entre América Central
y
Egipto.
Para justificar con
el
análisis aqnella apreciación diferencial que acabamos de
llamar artíscico-sensorial, es oportuno recordar la observación de la señora Amella
HERTZ:
"Nous voyons par exemple que la composition égyptienne est simple et sobre,
qu'elle s'effocce
il
cendre les objects d'une
manie~e
céaliste (méme dans l'omement, on
ceconnait aisément les plantes qui ont secvi de modele) et
ii
évitec tout détail superflu,
tandis que l'act maya a une tendance marquée
il
stylisec et
ii
ajoutec une foule de
détails peu ou m éme point nécessaires".
Esca observación, sin duda justísima, vale
tanto para el bajorrelieve, como para la escultora, la pintora, y el dibujo en general.
HERTZ, Amelie. -
L ' Egypte sous les quatre premieces dynasties et l'Amérique
centrale. Une contcibution a la méthode de l'Histoire de la civilisation;
11 partie; en
"Revue de Synthese histocique"
XXXVII (1924), pág. 9-38. Ver pág. 30.
Sin embargo, más que tales argumentaciones de carácter general, son convincentes,