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AUTORES SELEC10S
tuvi!esen paz
y
amistad.
Ellos le prometieron,
aunque el uno, por sentirs-e agraviado en la par–
tición, quedó con pasión
y
quis-o vengarse de su
contrario s·ecretamente debajo de aquélla amis–
tad ;
y
así el día en que solemnizaron las paces
comieron todos juntos, quier-0 decir, en una plaza,
los unos fronteros de los otros. Y acabada la co–
mida ·Se levantó el curaca apasionado,
y
Ue.vódos
vasüs de su brebaje para brindar a su nuevo ami–
go (como lo tienen 1os indios de costumbre) .
Lle–
vaba el uno de los vasos atosigado para J.o mata·r ;
y
Hegado ante el otro curaca le convidó con el
vaso. El convidado, o que viese demudado al que
convidaba, o que no ·tuviese tanta satisfacción de
su condición com'O era menester para fiars·e de él,
,S-ospechándo :Jo que fué, le dijo: "D.ame tú esotro
vaso
y
bébete ese". El curaca, por no mostrar
flaqueza, ;eon ·m 'Cha facilidad trocó , las manos
y
dió a su ene
·go el vaso saludable
y
se bebió el
mortífero,
y
den_de a pocas horas reventó, así por
la fuerza del veneno, como por la del enojo de
ver que por matar a su enemigo se hubies·e muer–
to a sí propio.
XXXII.
El destetar, trasquHar y poner nombre
a los niños.
·
Los Incas usaron hacer gran
f.iesta
al deste–
tar de -los hijos primogénitos,
y
no a las hijas ni
a los d.emás varones segundos
y
terceros, a lo me- . "
nos· no con la .solemnidad del primero. Destetá–
:banlos de dos años ar.riba,
y
les trasquilaban el
prim·er cabeHo con que habían nacido, que hasta
entonces no tocaban en él,
y
'les ponían el- nombre