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HORACIO H. URTEAGA

( 61 ) Se marcaron las tasas de los tributos, se principió una re–

ducción de indios a pueblos o cabezas de parcialidad ( 62 ) se

dispuso la traída de una colonia de mitimaes de la costa para

vigilar a los vencidos ( 63 ) , y se dejó una guarnición de in–

dios collas como mitimaes en la actual hacienda de " Porcón ".

Los tributos debían darse en productos del país, en oro y

en plata ( 64 ) , y se dispuso, a la vez, que las contribuciones

recaudadas debían ser trasportadas al Cuzco por los mismrn:.

caxamarcas

( 65 ) Dispuso, asímismo, el Inca, que buen nÚ··

mero de mozos fu eran llevados al Cuzco para servir en el

Coricancha como músicos y lo mismo en el palacio del Inca ( 66 )

Hizo reunir los tesoros del Curaca y de los indios principah:s ;

los persuadió de que debían ofrendarlos al Inca, su hermano,

para alcanzar de éste honores y mercedes, y pronto vió col–

mado su deseo. La plaza de Cajamarca se cubrió de ob.ivlos

de oro y plata, y como en futura época aún más trágica ( 67 ) .

mostró el inmenso botín de los afortunados vencedorc-,;.

Capac Yupanqui no quiso todavía abandonar Caja!Ylar–

ca sin realizar dos obras de importancia, éstas fueron:

la

construcción de una magnífica represa y canal que sirviesen

para la dotación de agua a la ciudad; quizá también empren–

dióse er.tonces, como lo cree Stevenson, el magnífico depósito

de aguas para el regadío de los llanos de Namora, ya que en ese

(61) .-

Véase

Reglamento de Tambos

en la época de Vaca de Cas–

tro.

Revista Histórica,

t. III.

(62) .-

De esta época, seguramente, datan los pueblos de Pariamar–

ca, (lugar de gorriones) , Chonta Paccha, Llacanor a, Urubamba, Yana–

yaco, Michiquillay y Cumbicos, así como las parcialidades Llushcapa::i¡1a

(p:!mpa de barro) . Quimraiqueru

(lade~a

accidentada), Luchupucro,

Huambo Camcl:a, Yanacancha, cte.

'\>~ ) .-'Véase

documentos del Apéndice sobre juicios de posesión de

Curacasgos: allí se asegura la existencia de yungas recién llegados bajo

los Incas, como mitimaes

en Chonta (en Chotapaccha

y los Tres

Mo–

linos) .

(64)

.-Véa.se

documentos citados del Apéndice y lo que declararon

los indios Caxamarcas hallados en el Cuzco.

(65) .-

Documentos del Apéndice sobre posesión de Curacasgos.

(66) .-Véase al respecto lo que cuenta el Padre Mateo Jumi!la en

su relación sobre los buenos cantores caxamarquinos y lo que hizo San–

to Toribio. REVISTA HISTÓRICA,

t.

IV, p. 475.

\67) -

Sarmiento de Gamboa! Ob. cit., párrafo 38, pág. 79.