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36 ESTUDIOS INDIGENAS.
mas celebre y estupenda formacion de gneis que se
registra en la historia del planeta.
Por donde quiera se tropieza con un nombre in–
digena, ya en la roca, ya en el valle, la altura, el
arbol, el rio, las costas.-Naiguata, Caruao, Macuto,
Teques, Terepaima, Macarao, Tacata, Mariches, Gua–
renas, Guatire, Oaucagua, Capaya. ?o Que significan es–
tos nombres ~ ~ Son puestos al acaso, 6 conservan al–
gnn snceso qne no ha podido borrarse de la memo–
ria de los hombres 0?-No; todo~ ellos simbolizan una
idea, una cansa, un triunfo, un desastre, ana lucha de
titanes, . los combates del Circo Romano, la defensa de
la"s Term6pilas, la gloria velada por la sombra, la
virtud escarnecida, la paz de los sepulcros. Si; to–
clas esas alturas sou tumbas, todos esos valles son
osarios. El panorama de la natnraleza ha cambiado
de vestiduras millares de veces; los rios, en su in–
constancia caprichosa, han variado de curso; pero el
oceano no ha abandonado las riberas que lame hace
· siglos, ni las escarpadas cmnbres han cedido al choque
del tiempo. _ La historia clel hombre necesita · de la
masa plut6nica, petrificada, inm6bil, y de la masa H–
quida, : dos fuerzas antagonistas, vencedoras
del tiempo y de las tempestades, que han formaclo
los relieves de la tierra.
Hai que guardau los montes, los vallei:;,
los precipicios: hai sucesos qne uo se relatan porque
los cueutan las montailas y los rios. Sobre las lomas
. desiertas hai huellas que. dejaron ~jercitos rivales; esas
huellas no sou jerogliticos mndos, sino signos topo–
graficos. La roca desplomada de la altura, estallanclo
eu su caida, es el eco de las pc.isadas carnicerias. El
arbol secular es la cronologfa que se trasmite al ca–
lor del sol y a l rocio de la noche. NaignaUt
no es pico, es atalaya; Terepairna no es cuesta csca–
brosa, sino escala de cadaveres; Guaire· no cs rio, es