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DE LAS SALINAS.

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determinaron de no pasar adelante, ántes de se vol ver á La

Nasca, adonde ya babia asentado su real Pizarro; y como los

vió volver y el corazon del hombre muchas veces adivina la

nueva que venir le quiere, dando una gran voz dijo: «¿qué

causa ha sido para que así hayais dado la vuelta? decidme

presto las nuevas que traeis

».

Gomez de Leon y sus compa–

ñeros dijeron : «paciencia .es menester que en este tiempo se

ienga »; é luégo contaron cómo Alonso de Alvarado era preso

é

desbaratado por mano de Almagro é su gente, é que lo ha–

bían sabido de los indios vecinos de Cochacaxa, donde ellos

le .habían dejado; é fué triste esta nueva para el Gobernador,

que nunca nenguna recibió que se le igualase. Temió en gran

manera Almagro viniese contra él, pues ya estaria con tanta

puj~nza

que lo podria hacer; é muy enojado

é

casi á manera

de exclamacion, dijo: "No merecian mis obras ni hermandad

que con Almagro he tenido, para que tan cruelmente ho–

biese tratado mis cosas, é mostrádose tan cruel é á la clara

mi enemigo,

y

entrado en el reino con banderas tendidas y

tocando atamhores, como si por ventura yo me hobiera de–

clarado co,ntra el servicio del Rey é negádole la obediencia

de vasallo que le debo,

y

él, por su mandado é ·autoridad,

viniera

á

reducir las provincias

á

su servicio; é no contento

con haber entrado en la ciudad del Cuzco , como ya acá sabe–

mos, é preso á mis hermanos, ir contra Alonso de Alvarado,

que estaba aguardando mi mandado,

é

prenderle

é

desba~

ratarle, caso por cierto muy feo é que me pesa que por él

haya sido hecho. E fuera bien que si la ciudad del Cuzco dice

caer en los límites de su goberna,cion, que se viniese

á

ver

conmigo, pues yo tengo la tierra á mi cargo por mandado

de S. M., é soy su Ca pitan general destas provincias, y que

mirara que fund é yo aquella 'ciudad

é

la gané <le poder de los

indios, é que vístonos entrambos, determináramos el nego–

cio, é cayendo en su gobernacion quedárase con ella con la

bendicion de Dios; mas no quiso él hacerlo así ni aeordar·se

del juramento que fué hBCbo .por entrambos en la ciudad del

Cuzco.

Pu.es

que así lo ha querido, yo espero en Dios de me