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pueblo llamado Potonchan, que quier.e dezir
casa
.qui
hiede,
y le salieron muchos yndios a punto de
guerra, en donde pelearon terriblemente los vnos
y los otros, que fueron heridos algunos de los
nuestros, .con muerte de muchos de los natura les,
y a Juan de Grijahia le quebraron alli dos dientes
de vna pedrada que le dieron en la refriega. Des–
de este pueblo passo adelante costeando la mar ,
y llegaron a vn puerto que llamaron Desseado, en
donde fueron rescebidos de paz,
y
de alli se fue
a vn rio grande que los suyos !Jamaron de Gri·
jalua, en donde resca[ta ]ron, con la buhoneria que
lleuauan , mucho oro, mantas ricas y plumas azu–
les, con otras cosas de gran val or.
Como]
uan de
Grijalua se tardasse mucho en dar la vuelta a
Cuba, embio en busca.del a J?edro de Aluarado,
y
a Xpoual de Olid en sendos nauios con cierta
gente. E n el entretanto que estos dos capitanes
yuan
~n
busca de Grijalua, y como se tardassen
ml1cho por alla los vnos
y
los otros, determino el
Gouernador hazer vna buena flota de naui os,
para embialla a Y ucatan, a fama de las muy gran–
des riquezas que Francisco Hernandez auia visto
en la tierra. Y assi determino embiar al muy mag–
nanimo y constante varon y nunca bien alabado
segun sus grandes meritas
y
val or, a Hernando
Cortes, natural de Medellin, en la Estremadura, el
qua! vino a Sancto Domingo en la nao de A lonso
<Quintero, vezino de Palos de Moguer, sien<lo de
hedad de diez
y
nueue años, auieñdo dexado el