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pueblo vn dia a nt es que entr:1sse en el porque su
contrario auia salido. Viendose Diego Cent eno ta n
cerca de la cibd ad, que eran trey nta leguas, no se
quiso de tener allí, por el g r a n peligro que co rría ,
que por ventura Alon. o de Toro saldría a el con
toda la vez inda d y so ldados y por ventura lo po–
dría desbaratar o pre nde llo , por lo qua l de termino
de boluer se a la prouinc ia de las Charcas a ntes
,
que otra cosa le sucediesse . '\.lonso de
~fendo<;a: ,
como no se atreui es e de agua rdar a Diego Cente–
no en el pueblo de Chocuyto, se salio del y se fue
co n los suyos a Ja cibdad del
Cinco,
en donde fue
muy bien r e cebido de Alonso de Toro, aunque
con gra n pesa r y enojo de la to rnada y salida el e
.Diego Centeno . Que ri endo \lonso de Toro yr cun–
tra el, Yido que no podia porqu e entonces tenia
poca posibilidad para haze r gente, por fa lta de di–
ner os, que so n los neruio para poder hazer la
g uerra , porque los que auia t enido los auia gasta–
do en la primera jorna da qu e a ui a hecho,
y
los
officiales de Su Magestad no le quiss ieron dar nin·
gun dinero. Por es tas razones
y
por otr os r es pec–
tos determino de no alir de la
ibdad, s ino de am–
parn lla y g uarda ll a, porque esta ndo el enem igo
tan cerca de a lfi, por dicha o desdicha no se la to–
mas en con engaño, o a lg uno se a l<;asse con ell a
mi entras e l yua
~l
encuentro de Diego Cent eno ,
como ya lo auian ynt e ntado haze r Ja otra , -ez s ino
fuera por Thomas Va squ ez.
ias no po r esso dexo
de llamar a todos los vezino , es ta ntes
y
habitan–
tes
y
a los m ercaderes
y
los pusso en esquadr on
en medio de la pl a<;a, porque los so ld ados que