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peor gouernados·. Todo lo qual se podría apartar
.con bu en
tie~1to
y
~ordura,
pórque haziendolo de
otra manera s·e podrían alb01:otar
y
escandalizar
1&~
gentes que quieren biuir en paz
y
en quietud.
Dezidme agora que es lo que piden los honibres
· en esta triste vida, que
)
a no ay quien se contente
-con la suerte que tiene, sino que creen
y
entienden
merescer mas de lo qu'e posseen,
y
assi estan sospi–
rando
y
anhelando por_tener mayores estados
y
ri–
·quezas, por amplificar
y
ensanchar sus nombres
y
memorias. Ta mbien se haze esto no a otro fin ·sino
dest~rrar
la verdadera paz, por dar lugar
á
que
se
deslize
y
cayga;
y
con la contraria todas lasco–
-sa:s cresc'en
y
se multiplican, y todas producen y
salen
á
luz, de manera que todas ellas van de pro·s–
peridad en prosperidad,
y
de bien en mejor. Y
para aueriguar esta verdad quiero preguntar
.agora a los potentados que ha auido en el mundo,
¿que se picieron de sus reynos
y
señoríos?; porque
los enemigos de la paz y los tiranos de las republi–
.cas, sepan y entiendan los que vinieren despues de
nosotros en lo que pararon. Primeramente pre–
.gunto a los assirios, ¿que pestilencia los destruyo?;
.sin duda µo responderiaÍ1, que grandes discordias
y
dissensiones. ¿Quien acometio a Grecia· siendo
.señora de la mayor parte del mundo,
y
le pusso
en tan grande baxeza?; no otra cosa sino vandos,
renzillas y grandes batallas que tuuo con los tro–
yanos, y despues con los turcos. A ti Roma, sien–
do ·señora tan poderosa en potencia,
y
poseedora
<le las naciones del mundo, ¿quien te reduxo a ser–
uidumbre., sino vandos, renzillas
y
grandes bata_-
·'