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bre de todos los cabildos de todo el Peru, en ·esta
forma y manera: Que su señoria yllustrissima les
g:uardaria todas las mercedes, priuilegios,
fran~
quezas, cedulas que tenían del.Rey los conquista–
dores y nueuos pobladores .de los reynos poblatlos
del Peru, y que no se las quebrantaria ag·ora ni en
ningun tiempo, y que les otorgaria la apelacion y
1
suplicacioJ1 de las nueuas leyes ante Su Magest(ld.
El Virrey mostró ·gran pesar co11. este juramento,
ma$ al fin el lo juró, dizíendo al cabo que el baria
todo aquello que fuesse al seruicio de Dios y al de
Su Magesta-d y al bien de los vezinos y al prou"echo
de los yndios naturales de toda la tierra. Los mal
yntencionados y los interesados que
~e
hallaron
present~s
á
lo ver jurar, di xeron que aquella jura
auia sido hecha con cautela y doblez de animo, en·
tendiendo en la espossicion della ser en pro y vti ·
lidad de los yndios, haziendo lo que el Rey manda–
ua, que ern mal para todos los ezinos de toda la
- tierra. Despues desto metieron al Virrey deba40
de vn palio muy rico que los regidores lleuauan,
y–
fue rescebido con graa acatamiento,
y
fue
apo~en- .
tado en las casas del Marques
Pi~arro,
que caen
en la plac;a,
á
~5
de Mayo de
1544
años. Desp_ues
que se uvo aposentado, y antes que comiesse, pre–
sentó ante los alcaldes hordinarios
y
reglíniento
y ante los official'es del Rey y ante muchos vezi·
nos, todos los recaudos y prouisiones que traya,
originalmente, estando presentes los
Reuer~ndis
simos obispos de Lima y de Quito,
y
Vaca de Cas–
tro; Geronimo de Aliaga, escribano .mayor
y
s..e–
cretario mayor del reyno, las leyo _todas,
y
luego