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Li!Jro ugunáo
.
11a con
aceyte,
y
despues hieren
no se
hinca en la
piedra ·
dura;
_con la lanceta
y
sa-can
sangre. sino antes de alli resurte ,
y
hie· .
De .e-s:t0s
dke el Profeta
{a) que
re
á
veces
al
que
la tiró. .
hahian
palabra-s mas blandas que
Y
por tanto si
el
que murmu-
cl oleo;
mas que
ellas de
verqad
r.a
es tu sábdito ,
ó
tal ·personá, .
:Son
saetas..
.
que
sin escándalo le
puedas man-
, -V:
como
quiera
que
sea gran
dar
qtte calle., débeslo hacer:
y
virtud abstenerse de toda
especie
-si
esto
no puedes,
á
lo menos
en·
de murmuracion; mucho mas
lo
tremete otras
plática~
discreta.
es
para .
c<>a
aquellos
de
quien
mente
para cortar el hilo
de
aque·
l;iabemos
sido
ofendidos: porque Has
=
6
muéstrate
tan mala cara,
quanto
es
mas fuerte el apetito que él ·mesmo
se
avergüence
de
de
hablar
mal
de
estos,
tanto
lo
que
habla ;
y
asi quede cor–
.es de,
mas
generoso corazon ser tesmente
avisado,
y
se
vuelva
templado
en
esta pa·rte,
y
ven-
del
camino. Porque de otra
mi–
cer
esta~
pasion. Y por esto aqui neta
si
le oyes
con
alegre
rostro,
conviene
tener ·mayor recaudo,
dáslé ocasion que
pase adela!lte;
donde
se conoce mayor peli-
y
asi no menos
pecas
oyendo
tá
gro.
que hablando
él;
pues
a'ii como
Y
no
solo
de
ma
d~ci
y
ur- es
gran
maldad
pegar .
fuego
4 -
murar~
sino tamb· en de oir len-
una
casa,
asi tambien
lo es
es–
guas
de
mu~muTadores
e
debes tarse calentando
á
la llama que.
abstener ,
g1.1ardando-aquel
con - otro enciende, estando obligado
sejo
del -
Ecles.~cico
, que di-
á
acudir con agua.
ce (b):
Atapa
tus
oídos con es-
Mas entre
todas
estas
murmll·
pina<3 ,
y
n0
oigas la lengua
del
raciones la
·peor .es
murmurar de
maldiciente. Donde no se con- los buenos: porque esto es
aco–
tenta
con
que·tapes
los
oidos
con
bardará losfiacos ·y pusHánirnes
algodonó con otra materia blan-
y
cerrar la puerta á otros mas
· da ;
sino quiere
que
sea con
es- _
flacos ,
para
que
no
osen entrar
pinas:
para ·que
nosolono
te en-
en
este
recelo. Porque
a1.rnque
tren
las
tales.
palabras en
el
co- esto no sea escandaloso
para
los
, razon , h?lgando de olrlas; si-
fuertes ,
no se puede negar
sino
no
tamb1en
punces
el
corazon que
lo es
para los pequeñuelos. Y
del que
murmura ,
haciendo
ma-
porque
no tengas en
poco
esta
la cara á sus
palabras:
como mas manera de escándalo, acuérda–
claramente
lo significó Salomón
te
que
dice
el
Señor (d): Quien
quando dixo (e)
:.El viento cier·
escandalizare á' uno de estos pe–
.za
esparce
las
nubés,
y
el rostro queñuelos que en mí
creen,
mas
triste la cara del que murmura. valdria que le atasen una piedra
Porque (como
dice
S. Hieróni- de atahona al cuello,
y
le arro–
mo) la saeta que sale .del arco, jasen en el profundo del
mar.
·
Por
.
.
(a)
Ps.
54. (b)
Cap.
~8.
(e)
Prov.
2;.
{d)
Matth.
18.