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XXXIV
LA lNQUlSlClÓN
VIII
Fragmento de carta del Tribunal del Santo Oficio de Lima al
Consejo de Inquisición, afio de
1S72.
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El negocio de Francisco de Aguirre, gobernador
que fué de las provincias de Tucumán, le trajo pre–
so Pedro de Arana á este Sancto Oficio en el mes de
mayo del año pasado de 1571 años; entró en las cár–
celes; hásele puesto el acusación, y como habemos
escripto á V. S., porque desde aquí á donde se han
de ratificar los testigos y examinar los contestes, hay
seiscientas leguas, háse tomado orden que en seme–
jantes negocios se le dé la publicación y él haga sus
defensas,
y
todo se haga junto, las ratificaciones y
las defensas, porque si se hobiese de aguardar á que
.se ratificasen y después hacer las defensas del reo,
serian los pleitos inmortales, por haberse de hacer
en tierras tan remotas, que para entrar en Tucumán
han de ir por casi trescientas leguas de indios de
gue:-ra, y no se entra sinó de aiío á año y con mucha
dificultad; habemos enviado á hacer lo uno y lo otro;
venido que sea lo veremos en definitiva; é porque en
la primera relación dijimos sobre lo que era, en esta
no ha de qué avisar á V. S., mas de que él, á lo
que parece, está todavía en decir que no ha sido im–
penitente, aunque se le prueban ·muchas impeniten–
cias, y que no está humilde. Pedro de Arana dió
cuenta en este Sancto Oficio de todo lo que se le se–
crestó
y
do lo que hizo dello como hombre honrado,
é hizo su oficio muy bien,
y
do lo que sobrello se de–
terminare, daremos noticia á V. S.