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)) cetlian poi' hallarse estrechados por ·los sinsabores
é
)) injusticias que experimentaban, despechados
a
defen–
)) derse, como era justo por derecho divino
y
hu1nano.»
Y teniéndose noticia de los estragos que venían conw–
tiendo los indios guarani s del ejército de
D.
Baltasar,
vieron los vecinos que se trataba de la defensa de la
vida
y
de la honra,
y
salieron cerca de tres mil hom–
bres con el cabildo
y
gobernador Antequera,
y
traba–
da batalla, volvieron espalda los guaranis. Los padres
Policarpo Dufo
y
Antonio Rivera daban las disposicio–
J1es de la guerra,
y
quedaron prisioneros despues de
la
victoria.»
·
1
!8.
Los padres de
la
con1pañia se creyeron auto–
ti
zados por la derrota
á
ca1nbiar de
fhz
los sucesos,
y
·en
venganza se en1peñaron en que aparecieran como
·criminales los que vencieron,
y
principahnente el
se~
.ñor A.ntequora,
á
quien
era preciso atribuir el papel
que cu1nplia
á
sus perseguidores: de anten1ano se
ba–
bia
resistido
á
pron1esas hechas con prodigalidad. Los
lectores que pasen la vista por los doclu11entos
á
que
nos referirnos, conocerán
á
poca diHgencia el n1érito
de este magistrado, profundo en la ciencia de su pro–
fesion, distinguido literato, ho1nbre probo y de repu–
tacion en el concepto de los grandes,
á
quienes se igua–
]aba,
y
de
los pequeños y miserables
á
quienes servia.
Pero los padres de la cm:npañia no pudieron
perdo~.
narle sns virtudes, ni el haberles hecho resistencia, en
yez
de som.eterse con1-o los demas y buscando sun1a–
rjas calurnniosas, trabajaron para que se
le
for1nase
-causa
y
fuese conducido
á
Lin1a .. ... ......... .
_En la
cárcel estaba,
y
de
ahí
escribia
al
obispo
Par
1os
del Paraguay, haciéndole sentidas
y
razonables
re–
convenciones, por los 111alos informes que contra él
había hecho ante la real audiencia de la Plata, el supe–
J'ior g;obierpo del virey,
y
ante el rey n1isn1o; y mani–
festá11dG1e las n1uy notables eq-uivocaciones en que ha–
bia incurrido, asi .le decia entre muchas cosas-"IJo
)) mas sensible. para 1n.Í
ha
s1do, es
y
serú, ver que dan
))
por justos mis padecimientos con la autoridad de
V.
)) S.
I.
que con tanta aceleraciou inforrnaba
á
su llega–
>;
dá
sobre cosas que
~o
tenia tien:1po de saber.
I.1a
real
>i
cédula es de 12 de de Dicíe1nbre de 1724,
y
en ella
>>
se
hace n1c1noria de una carta de
·c.
S. I
qne llegó