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-,-

1~-

trad ncion

ó

en el impresor, sino ha sido noticia equi

\TO–

cada do ;LVI. Cretinean-Joly.

10. ''El general tiene

:.í.

-su 1ado un vijilante

y

asisten –

tes." Pero ¿ese .vijilante ó monitor

y

eso:-; as1stontes im–

pedirán el absolutis1no del general, absolotismo funda–

do en la misma

i

nstitucion?. iÜ hnpodirán el1nal uso que

.de sn absolntismo qniera hacer el

general~

Si en vez de

este se hablára de los provinciales, qne tienen ta1nbien

asistentes nombrados por el general,

y

de

~los

cuales

·uno tiene el encargo de monitor, la observacion tendría

f uerza; pues tales asistentes tienen que dar cuenta se–

creta al general de la conducta de los

respe~tivos

pro–

vinciales,

á

quienes asisten

y

sirven de tnonitores. Ca-

da provincial tendría que moderarse á la vista de sns

asistentes, euando estos no so le prestáran

y

fueran cóm- _

plices, pues en Roma había un superior, que sabria to- ·

das sus acciones. Pero iel general

á

quien tenia que

temer; quien. moderari-1 los escesos de su :absolutismo? ··

.Los provinciales tenian facultades limitadas,

y

no eran

dueños:de remover

á

los asistentes

y

monitores; mien–

tras que el Prepósito general de la órden revestido de

on1nipotencia)

y

con facultad de apartar de su lado al

monitor

y

a sistentes, nombrados por la congregacion:ge–

ner~l,

y

sostituirlos con otros, si llegase el caso, hipo–

tético sin duda, de que no fueran de su confianza, nada ,

tenia que temer,

y

ningun obstáculo le era insuperable

para llevar al cabo su propósito. Por otra parte,

lo~

asistentes solo tienen voto consultivo.

(5)

·

11.

N o podemos tern1inar mejor este artículo, contrai–

c)o

á

manifestar el inmenso poder del general, que po–

niendo en parangon su autoridad con la del Papa, para

ver.quie·n podia mas en la compañia,

ó

á

quien obedecian

n1as los jesuitas.. De palabra

y

por voto

y

textos de sus

~

onstitucion.es,

sobresaldrá el Papa; pero otra

co~a

se–

en la práctica,

á

1.11as de ser frecuente la obediencia

al general, como no lo es ·ni puede serlo regularmente

la eventual al Papa. Los datos están repartidos en la

-primera parte: hagan uso de ellos nuestros lectores; que

:posotro$

vamos

f!

pre~entarles

un Cl}adro

90111p1~esto

:por