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cHlSTORlA ECLESIASTICA
fllerzos el Protestantismo fué contenido en
sus progresos,,
y
Jas nni versidades de
AnA–
tria
y
de Baviera volvieron
á
florecer para
defender la jel'arquía eclesiástica
y
e dog-
1na católico. Los mfsioneros Je1:mítas lle–
varon la religión de Cristo hasta los
más
remotos países; Francisco Ja.vier
la
predi–
có en el Japón. La virgen América fué tam–
bién teatro de sus
a.sí<luos trabajos,
y
en–
tre las muchas misiones qne fundaron son
mny
notables las del Paraguay; que pro–
gnssa.ron
rápidamente
b~jo
srt gobierno
pa–
ternal. No fueron menos nota"bles los
ser–
vicios que prestaron los
J
e&uítas en las· ar–
tes
y
ciencias: ellos generalizaron el uso
de la qai a;
t
templos abrieron un ancho
CRmpo al rog eso
de
las bellas artes;
la
filosofía.,
el>
ogía y fi1ología fueron culti–
vadas p
re
lo con · ruto;
y
las matemáti–
cas, ciencias
naturaie~,
astronomía
é
histo–
ria' hicieron grandes adelantos en sus co–
legios.
Supresión
~de
los
Jesuitas.
-La
gra.riin..
fluencia que los
J
esujtas llegaron
á
ejercer
y
les
ataques
que
se
les hacía de
sostener
nna moral
relajada les
atra:jeron muchos
enemigos, principalmente entre los filóso–
fos
y
gobernantes.
Así
después de haber
dominado en la sociedad pov dos siglos, sn–
uumbieron
en la 1uuha que
contra
sus
ad–
versarios sostuvieron. Arrojados de l?or–
tugal
por
el
l\'linistro
Marqués de
Pombal,
á
consecuencia de una conspiración cierta
ó ·