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G~NEltAL.
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l
plritu~
!ediciosos osaban hacer
eontra
las Siglo
Constituciones Apostólicas. Gregorio XIII, XVIL
para satisfacer
á
los deseos del
R.eyde Espa-
ña , env¡.ó un nuevo Delegado
áLovaina ,
en–
cargado de trabajar
en
el restablecimiento
del
buen 6rden
y
de la paz en la
Iglesia Belgi-
ca , llamado Juan Hornobono , Obispo
de
Berseil.
Este Prelado
á
su llegada
trató
del
objeto de su mision con
el
Arzobispo de
Malinas , el qual , como veia las cosas de mas
cerca, conocía mejor
que
nadie
el
grandor
del tnal
y
la naturaleza del remedio que era
menester para curarle. Conviniéron en que
no ha bia otro que el de
hacer forn1ar
un
cuerpo de doctrina, en que las opiniones opues-
tas
á
las opiniones condenadas se expusie-
sen con claridad,
á
fin de quitar
á
Baio
y
á
sus
discípulos todas
las
sutilez3s , todos
los
efugios de que se valian para libertar
de
la.
censura las proposiciones que se obstinaban
en defender, explicándolas en un sentido fa–
vorable.~Juan
Lens ,
Teólogo,
de un ingenio
penetrante ,
y
de
una grande capacidad , fué
á
quien se dió el cargo de este trabajo, al
qual se puso sin pérdida de tiempo :
y
queln-
do le hubo acabado, le mandó el Obispo
de Berseil presentarlo
~
la Universidad, la.
qual le
adopt6 con
unánime consentimiento
para guiar
á
los profesores en la enseñanza
pública ,
y
á
los estudiantes en los exercicios
B
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por