~!)l.
eoNFERENCIAS DE GERONA,
veche caG
a
todos
?
Pocos hay, que crean et'rar
tan malos como eíHn,
y
gne no confien
ef~apar.
de fu enfern1edad,
y
eíl:ar buenos :
y
es cierto,
P.Nleretnberg
que la eJPorcmza de vivir,y perfoadirjeque no
e}lan·
Obras Chriftia.-
tan malos, es una terrible tentticion, que ha derriba..,
rr~ds
to'ml.
I.
'Par-
do
a
muchos
a
los Infiernos:
como advierte muy
t~
a a a Eter-
b'
1
V
p d E
r.
b' N'
b
r..
ni.!a-d
c.Ir.fol.
1en e en. a re Uie
10
1erem erg. Y a1s1
66 9 •
veafe
y
e~ecutefe
lo que efcribe uno de los di–
P.Corella'Prac-
chosAutores, que es
el
Padre Corelb.:
En todo
tica del Con fe-
cafo conviene mucho, que
el
Medico por
si,
o
por otra
fionario
tra.éf.
Perfina cen buen modo
fl
lo
de a
entender alEnjer–
.r~.
cap.J.n.z
3
·
mo, porque confiado en que ha de vivir,
no
fi
difcui-
de del importantijJ-imo negocio ·de
la
Jalvacion de
fo
Alma;
y porque deftngañado de que
fu
vida terr.porat
fi
acaba
,
folicite con mas empeño la conftcucion
d~
la
tterna.
3
2
Debe pues
el
Medico denunciar la muer·
te
a
los Enfermos)
o
por
St)
o
por otros.
y
def–
pues de an_unciada (mayormente qnando la anun–
cia por medio de otros, como afsi fucede regu–
larmente) vaya con gran cuidad<? en todo lo que
dice
y
hace con los Pacientes , paraque de fus
palabras
ó
acciones no puedan tomar pie para en–
trar en nuevas efperanzas de vida . Por conGguié–
te inria mal qualquier _Medico,
q
entrando
e~
el
Apofento de alguno de eíl:os Enfermos defahucia–
dos, defpues de haberle mirado, obfervado
y
puL.
fado, hicie!fe algunas acciones con
la
cabeza,
Q
con las nunos
~de
que el Enfermo pudielfe infe–
rir, que el Medico no le halla en tan mal efl:ado.
..:omo crela
hallarle.Nomenos baria mal,íi dixdfe
al Enfermo,
oa
fus Afsifl:entes,de modo que
el
pn–
didfe \>irlo:
Mientrds
ba_¡
7lida
>
ha¡
ejjeranzas;
.
o