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(;omez
Differt.
Mo rales
y
Me~
dieas di_G'er
t.
l•
1~.48.
fot.33•
11.
'o
C -oNFERENCIAS DE GERONAi
ya
agonizando;
y
juzga, que dentro de una
o
dos
hor::ts habd muerto. Dice luego
a
los Parientes;
que vaya el uno corriendo
<t
bufcar el Parrocho,
paraque venga aprif:1.
a
Sacramentarle; y que vaya
otro
a
bufcar dte,
o
aquel medicamento.
E~1
eíte
cafo, como por lo regular, la gente de femejantes
Cafas fuele fer para poco , y amas de eífo teme
el
Medico, que antes que
llegu~el
Parrocho,
el
Enfermo ya fera difunto: debe entonces el
Me~
~lico)
no folamente denunciar la muerte
a
aquel
pobre Enfermo , fino cambien,
a
impulfos de la
ley de la charidad, ayudarle
a
un verdadero arre–
pentimiento de fus pecados, con fervnrofos aé'tos
de
Contricion &c. como afsi se que lo ha14 praé'ti- ·
'cado y praéhcan en eítos cafos, diferentes Medi–
cos muy timoratos de conciencia.
-
30 Todo lo que fe ha expuefto fobre eíta ter–
cera oblig:1cion, lo confirma admir::tbl emente
.el
·mencionado lv1edico Don Pedro Leon Gomez;
pues habiendo aífentado en una de ft.1s Diferra–
ciones :
Si_el Medico teme, que de
110
hacer Tefla- .
mento el Enfermo
,
que efla m peligro de muerte,.ft
han de Jeguir diflurbios
,
o
graves danos de.fpues de
muerto, dicen los Padres Salmanticenfes qut: peca gra–
vemente
,
Ji
no le manda
,
o
por
st,
o
por otros, le
haga;
;immedi::ttamente defpues , hablando del
'punto que tenemos entre manos, pro0gue dicien–
do :
Y tambien peca del mifmo modo
el
Medico, que
quando conoce
fe
muere el Enfirmo
,
no lo avifa a to$
fercanos Parimtes,
o
Afsij}mtes,
o
al Parrocha , pa–
raque
fe
to adviertan
;
pero en no decirlo por
si
al
Enformo
,
filo tmdra culpa g r a·ve, quando es preci-
fi,
paraquf
ft
fonfieft
~ ~
reábtJ el
Vit~tico,
o haga
-
rif--