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J.
DE CUARESMA.
P R O P O S I T O S.
1
Hay infierno; es decir, hay un lugar destinado
por la omnipotencia de Dios para atormentar eter-namen–
te con fuego y con todos los suplicios posibles
á
los án–
geles rebeldes, y
á
todos los que muriendo en pecado
mortal, mueren en desgracia de Dios. Estos tormentos no
deben tener jamás fin, ni estos condenados tendrán ja–
más el menor alivio. Bastantes personas conocidas mías
con quienes he vivido están ahora en el infierno. Muchos
de aquéllos con quienes vivo al presente tendrán la des–
gracia de condenarse ;
y:
yo mismo seré de este número
si muero en pecado mortal. He aquí lo que muchos gran–
des santos se decian casi
á
toda hora: haz tú lo mismo.
2
Hay infierno: no
hagas~
digas, ni emprendas cosa
alguna sin que la árregles , ,por decirlo así. con este pen-·
miento. Dite en todas las ocasiones á ti mismo :
i
Por
ventura en este proyecto, en este negocio, en esta obra;
en esta diversion, en este trato hay alguna cosa que me
pueda llevar- al infierno?
i
De qué me servir.á haber pues–
to en planta todos mis proyectos, haber salido bien con
cuanto he emprendido, si me condeno? Luego que oye–
res hablar de la muerte de alguno piensa que el mundo
se ha acabado para él, y que ha entrado en la eternidad :
doite de barato que ·el Señor ha usado de misericordia
con él, y se ha salvado ; pero si se ha condenado , &c.
Haz á menudo estas reflexiones, porque no
bay
duda que
son muy útiles.
VIERNES SEGUN DO
DE
C
U AR E S M
A.
E1
introito de la misa de este dia es del versículo úl–
timo del salmo 16.
Ego autem curn jus'titia apparcbo in
conspectu tuo
:
satiabor dum manif'est.abitur ghria tua:
por lo que á mí toca, compareceré siempre puro á vues–
tros ojos;
y
no estaré plenamente contento sino cuando
Ez