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y
_p¡a.cüente ;
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Mrnistro
del E vangelio,
anir~ado _der es~e
1
zelcr
,:1e1'íoS.
deaco1..
bardarse al ver la inutilidad 'de
sus
trabajos,
1.11ulti–
·plíca sus votos
y
sus oraciones por los pecadores;
d.es..
confiémos
de un
zehi que ,se irrita- contra:','.e\ pecador
tanto comp
c~mtra
el pecado.
El
zelo duro
y
a{llargo,.
no es
propiament~_otra
oosa que.una pasion maligna',
,que se disfraza con .el nombre de_ zelo, para poder sa–
tisfacerse sin vergüenza ,
y
q_ue
introduce su veneno
por entre una,tnáscarilla de.,car
ida~.
Este -verdadera
zelo jamás
se
hall ,junto cqn el
espíritmd~ vengan~a~
pi
con el espíritu de parüdo,.
El
zelo es vivo
y
ardien...,
te,
pero nunca es ácre.
·Los
dos· Ap6stoles t0davía
imperfeétos, querian hacer .baxar fuego del Cielo pa..
Dia XXX.
r
ext.er~inar
.qn
pueb.lo;de ·pamária; que 'no
babia , .
querido admitir al ·Salvacl.oir. Pero J,esu-Oh,risto les.
di.xo:
No sabeis de que espíritu estais anima'dos,,
quando así hablais. De este mismo espíriru están
ani~
mados..todos los que.tienen
un
zelo ·picante
y>
ácre:
Lt(
mansedumbre,
la .bmmildad d€
corázon -,
la
oompa-.
sion de
los
pecadores,
y
Ja :miser.icor·dia:,
-son. ..el ca_,
ráéter
y
distintivd de todos' los
hombres
Apostólicos.
Esa amargura
en el
zelo
nac~
ordinariamepte
de un
espíritu orgil!llloso , y.'<i:e
un-
corazonlcclrrom
pid,~. Le~
c,onfieso que tienen
z.elo
por
la
Ley ·,
·cfüce·
d
Apóst.{11¡
perq este zeió
no~ es•
segun:
cienfiir.
'Fat
,es el
Q~ráél:e.r:
de los defensores de la verdad;
al
friismo tiempo
que
se les persigue hasta el exceso,
y
se les censuran sus
mas santas acéiones, disculpan el furor
y
la cegue- ·
·.. :
004
dad