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DEVOTOS.

29r

cum

vénerit,

pulsáverit, conféstim apériant ei.

D'a XIV.

Beáti serví illi, quos cum vénerit dómintts

invér;erit

vigilantes: amen dico vobis, quod prcecínget se,

á ..

ciet illos discúmbere,

tránsiens ministrdbit illis. Et

si vénerit in secúnda vigília,

si in tértia vigília

vénerit,

ita inv'énerit

bedti sunt serví illi. Hoc

autem scitote, quóniam si sciret paterfamflias, qua

hora fur ventret, vigildret útique· ,

non síneret

pérfodi domum suam. Et vos estóte pardti: quia qua

hora non putatis, Fílius

~óminis

véniet.

MEDIT ACION

DE LOS PESARES QUE TENDRA

un condenado.

P U N T O P RIME RO.

Onsidera,que tales serán los pesares de una alma,

que

infierno que ha perdido

Dios,

que le ha perdido por su culpa, que le ha perdido

por nada,

que le ha perdido para siempre. ¡Qué pe–

sares, qué rabia, qué arrepentimientos inútiles , qué

desesperacion no debe causar á una alma condenada

esta triste verdad: Yo he perdido á Dios,

con esto

lo he perdido todo, pues he perdido la fuente de tod@

bien! He perdido

Dios, á este Dios para el qual uni–

camente fui criada;

este Dios que es mi soberana

fe–

licidad, mi ultimo fin ;

este Dios , el mas amable de

todos los padres , el mas magnífico de todos los Re–

yes , el mas dulce·

mas liberal de todos los Seño–

res ; he perdido

este Dios ; es decir; que este tierno

Pa-