E XE RCICIOS
Diciembre. vos de Dios , de la qual esta primera barbárie no era
mas que un preludio, que suplicó con instancias al Se...
ñor la sacára de una tierra, en que el nombre de su
Di~
vino Esposo .iba
á
estar en execracion ,
y
en que se iba
á
hacer una tan espantosa carnicería
1
en los Fieles.
Fue oída su súplica; y en el mayor fervor de su ora–
cion, habiendo besado tiernamente una cruz , que ha...
bia grabado milagrosamenté en una piedra dura con
sola la impresion de su dedo, espiró de repente. Esta
preciosa muerte sucedió el dia nueve de Diciembre
del año
303.
Algunos afirman que habiendo sabido
nuestra Santa en la cárcel los combates
y
el triunfo
de Santa Eulalia,
y
de los otros Mártires, se puso en
oracion para pedir
á
Dios la gracia de gozar quanto
antes de su gloria;
y
que este deseo de ver
á
Dios
fue tan ardiente , que le entregó su dichoso espíritu
entre estos violentos transportes de amor Su cuerpo
fue arrojado al
cant.popor los Pagános ; per<:> los
Christianos tuvi
eron cuidado de llevarsele ,
y
enter–
rarle en un sitio muy cercano. Despues se edificó
una
magnHica Iglesia en
el
parage donde estuvo sepulta–
da ,
en
cuya Iglesia se tuvieron muchos Concilios ,
y
en ella misma sucedió aquel gran milagro que
refie–
ren 1os mas antiguos Autores.
Estando en oracion San Ildefonso, Arzobispo de
Toledo, ante el sepulcro de esta Santa,
en
presencia
del Rey Recesvinto y de toda la Corte, se quitó por sí
misma la lo
sa que cabria el sepulcro, la que era de
una enorme
grande.za; Santa Leocadia salió del se–
pulcro cubi
ertacon
ungran velo,
y
encarandose con
el Santo Arzobispo, le dixo: Eres dichoso Ildefonso
en tener
una
tan viva
y
tan
tierna devocion
á
la
San~-
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