SEñOB..
NUE.STRO.
I
13
de pr6ximo coinprehendía Jesus
a
los estrangeros .,
o
solamente
a
los hermanos ' le dixo :
¿,y
quién es mí
próximo_'?
A
esto le respondió el Salvado!:•con la pa–
rábola de un hombre , que habiendo cafcfo en manos
de ladrones, los que lo hirieron,
y
de:xaron medio muerM
to en el campo , no fue socorrido , ni por un Sacerdo–
te ,
.ni
por un Levita, los que se pasa·ron de largo , sín
subministra~le
ningun socorro; pero lo fue por un
Sa–
maritano caritativo ' que compadecido de él ' tomó
a
su cargo
el
curarlo, limpiándole él
mismo
las llagas ,
y
vendandoselas ; haciendo vér con este exemplo ' que
el amor del próximo , debe ser un amor ·universal ,
un ·
amor eficáz'
y
no un amor de
paysan~ge,
ni
de
pu-1
ro cumplimiento.
·
··'
'
.
m
§.XXVIII.
DA J-ESUS
DE
COMER, A ' 'µAS DE
cinco milpersonas, con cinco pa'l!es
y
dos,_ peces.
.
H
Abiendo sabido Jesus que Herodes
había
hecho
morir
a
San Juan ' y Aoticioso igualmente de
lo que se decía de él en lá
~orte
de este Príncipe ; se
tnetió en una barca con sus ·Disdpulos;
y
habiendo
atravesado el lago de Gegezaret, fue
a
abordar
a
un
lugar muy solitario en frente
d(¡>
Betsayda. Pero por
desierto que fuese ·el log
ár ;' se-
vió bien presto llegar
a
él una infinidad de
g~
n.tc: ' mas 'de cinco
mil
perso–
nas habían caminado
a
pie casi todo
un
día ' para
ir
a
encontrarle ,
y
les1era
preciso
hacer
o~ro.~ tanto
cami–
Ao
para volverse
a
casa ) sin
que hubiesen tomado to-
p
da~