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D I.A XVIJ.
expuesta
á;
las- fa-lsas .áp:uiencias · que
el
maligno seductor
pinta como verdaderas virtudes ,
~uya
terrible fatalidad po–
dria exponerb. á sufrir ig11al vergonzosa desgracia 9ue aquel
fanático: pero
el
Señor, que la favorecía, ofreciendole su
asi)tenci<} en semejantes contrariedades , desvaneció las cau–
telas imaginarias de aquellos consqltores que no hiciéron ¡
el
preciso discernimiento ·de su espíritu ,
ni
se intern.áron '
en
el
conocimiento del recto órden de su corazo:n.
·.
~,
S~.:ntia
María Ana ,
á
pesar ·de sus esfuerzos en
el
servi–
cio de Dios , cierta pei?a int_erior en no encontrar Direc–
tor
á
medida de su espíritu , pues
de.
los que havia con–
sultado cada uno
la
condtKÍa ·por diverso can1ino. Llevó–
la
un impulso secreto
á
buscar '
el
·sabio .gobierno de Fray
Antonio del Espíritu Santo , Religioso Descalzo, de ex–
celentes luces , y conocida virtud , residente en el Con-
. vento de San ·Bernardino , extramuros ·de Madrid; pero
aunque éste la dió
á
gustar
pm·
aLgun tiempo ciertos con.,
suelos , echaba todavía ni.énos
el
lleno que, apetecía.
En–
tró cierto dia en 1a Capilla de nuestra Señora de los Re–
medios
á
visitar
á
esta preciosa _Imágen , qne se venera
en
el
Convento de la Merced,
y
vien~o
en
el
Confe'so-,
1urio al Venera5 e Fr. Juan Bautista, gran
Maesr.rode espí,.
ritu (Fundador que
fué
despues
de
la Reforma
9el
Or–
den )
n1ovida
-interiorment~
, se llegó
á
confesarse con
él;
y
comunicóle con la mayor humildad , y sencillez lo que
Dios obraba en su ·ahna',
y
lo
qu~
para corresponde-rle agra:–
decida apeterda ) oyéndola ,con admiradon ; el Venerabfe.,
.fo'rtificó ,sus :di sposiciones,
1
dilató, su espíritu ,
y ,
le
·presetiÍr
bi
ó ·máxi.mas · para subir
al
al;o g1adQ ·qe
~pei-feccidn
cpa)11
el que Dtos la llamaba. Llena de gozo ·.Mana Ana en haver
encontrado la
luz
qne deseaba , se sometió
á
su gobier–
no, con
el
que siguió toda su viaa;
a
excepcion
del '
corto
iempo
qu~ ~ilvo .
precision de s-epararse, por n1otivo
de
la
~t;sencia
que su p_adr(t , criado del Rey , . t:i,zo
á
Valia–
do
ha ,
donde se paso
la
Corte, y donde se h1c1eron bastan–
te sensibles
la~
virtudes eminentes de María, Ana , baxo la
direccion de Fray Andres de la Puente, célebre Religioso
Dominico , que tardó n1uy poco tiempo en formar juicio
prác-